Vuelvo a Tenerife y quiero ver nuevamente el mirador de Masca, desde donde se divisa un panorama fantástico, y donde existía, al menos hace años, un bar con parasoles donde podía tomarse un refresco. Bajando por la carretera, llena de curvas, y antes de llegar al pueblo de Masca existe un pequeño casería donde hay un bar-chiringuito que tembien tiene una vista deliciosa y que además está montado con mucho gusto. Quisiera volver a descansar en él y tomar una copa deleitándome del paisaje y desearía, ... (ver texto completo)