Iglesia de
Santa Ana. Su actual construcción corresponde a la segunda década del siglo XVIII, aunque conserva la
portada principal, del siglo XVI, y la
puerta sur, del siglo XVII. En la
capilla mayor se expone; un magnífico Crucificado de Martín de Andújar y dos tallas de Luján Pérez que representan a
San Joaquín y a Santa Ana. Existen también tres tablas de la
escuela madrileña, de finales del siglo XVII. Desde el siglo XVI hasta la primera mitad del XIX, la imaginería es la forma escultórica más característica en
Canarias. En el siglo XVI aparecen modestos imagineros que esculpen y policroman sus trabajos. En Las Palmas, Cristóbal Hernández y Diego de Landa, que fueron seguidos por otros en el siglo siguiente, como Agustín Ruiz y Pérez Donis. En
Tenerife, el maestro Martín de Andújar trabaja y enseña el difícil
arte. Había colaborado con los imagineros peninsulares Montañés y Alonso Cano, siguiendo las directrices del barroco sevillano. Sus discípulos Francisco Alonso de la Raya, nacido en
La Gomera, y Blas García Ravelo, de
Garachico, continuaron la labor emprendida por aquél.