Púlpito de la iglesia de San Marcos Evangelista, ICOD DE LOS VINOS

Es por ello pueblo dependiente de aquel en la órbita mercantil, aunque desde la caleta de San Marcos habrá un cierto comercio y se desarrollaría una primaria construcción naval con astilleros gracias a las ricas maderas de sus bosques por entonces vírgenes. Mientras que la caña de azúcar hasta mediados del siglo XVI fue el cultivo hegemónico, Garachico será la capital demográfica y económica de la comarca de Daute. No obstante, a medida que avanza la centuria Icod sigue creciendo en población y prosperidad. En 1585 contaba ya con 350 vecinos, lo que da un total aproximado de 1750 habitantes, frente a los 520 (2600 h.) que albergaba Garachico. En torno a esa época Fray Alonso de Espinosa diría de él que era un pueblo de mucha vecindad y hombres honrados y ricos, está edificado en la falda del Teide con buenos edificios y hay en él mucha madera. El portugués Gaspar Fructuoso lo definiría como villa de doscientos vecinos, casi todos portugueses, rico de vinos, labores y crianzas.
(10 de Julio de 2019)