Destaca la devoción que gozaba
San Felipe Neri y su
ermita, “de mucha devoción en toda la isla” y la existencia de dos escribanías, el mismo número que
Garachico, lo que es indicativo de su expansión e intensa actividad mercantil. En 1591 sus milicias quedaron desmembradas de la dependencia y sujeción de Garachico, una pugna que será constante en la lucha por la hegemonía de Daute entre ambos municipios. En 1687 logró alcanzar la independencia también en la órbita inquisitorial con la consecución de una Comisaria de la Inquisición propia. Contaba con un
hospital para pobres desde 1555 que en 1697 fue ampliado con la constitución de un patronato al Canónigo de la
Catedral de Las Palmas Francisco Leonardo de la Guerra. Desde 1585 contaba Icod con un
convento agustino bajo la adveración de San Sebastián. Se estableció en una antigua ermita de ese nombre. Su patronato fue más tardío y recaería en 1655 en uno de los más ricos e influyentes aristócratas de la localidad, Blas de Alzola y
Torres.