Parque del Drago. El parque está atravesado por el Barranco de Caforiño, conocido en la
antigüedad como "
río de Ycod" por la gran cantidad de
agua que bajaba siempre por él. Para cruzar de lado a lado se dispone de dos bonitos
puentes. A los pies del Drago se creó una zona dedicada a los dragos más pequeños, denominada "Guardería de Dragos". En ella se muestra el proceso evolutivo de esta especie. Leyenda. Una tarde remota en el pasado, cierto navegante mercader llegaba de las costas atlánticas en busca de sangre de drago, producto muy en boga y de gran importancia en la elaboración de ciertas preparaciones de la farmacopea, y desembarcó cerca de la
playa de
San Marcos, de
Icod de los Vinos, para llevar a efecto su lucrativo propósito. Estando ya en la playa, sorprendió allí a unas infantas o damas de esta tierra, que conforme al rito tradicional se bañaban solas en el
mar aquella tarde veraniega. El intruso navegante las persiguió, logrando apoderarse de una de ellas. Esta trató astutamente de conquistar el corazón del extraño viajero para intentar distraerlo y lograr huir, y mostrándole signos de consideración y
amistad le ofreció algunos hermosos
frutos de la tierra.