La
casa de los Ximénez-Franchi es sin duda alguna una de las casonas urbanas históricas más monumentales de
Canarias. Situada en la Villa de
la Orotava, a continuación de la celebérrima “Casa de los
Balcones”, este fantástico
edificio del Siglo XVII no ha recibido, en nuestra humilde opinión, el reconocimiento que se merece, quizás por estar a la
sombra de su egregia vecina o por considerarse equivocadamente por muchos como una mera prolongación de la anterior, sea por la razón que fuere pocos
edificios urbanos canarios tienen el porte y el abolengo de éste. Esta histórica mansión de
Tenerife fue construida en torno a 1642 por Doña María Ximénez de Fonte del
Castillo y tras pasar por muchas manos, en la actualidad está destinada a ser centro de interpretación y divulgación del denominado “
arte efímero”, eufemismo con el que se quiere designar a la preciosa
tradición orotavense de realizar alfombras de
flores y tierras de diferente pigmentación natural, con motivo de las celebraciones de la Octava del
Corpus Christi. La casa, actualmente de titularidad municipal, por tanto, es regentada hoy en día por la asociación de alfombristas. Así, además del deleite que supone recorrer el
patio, estancias y galerías de tea de esta fantástica mansión, el visitante, puede tener la oportunidad de adentrarse en el conocimiento de las técnicas y materiales que desde 1847, vienen empleándose en La Orotava para engalanar los adoquines de las históricas
calles de la Villa y que acaban, al final de la festiva jornada, desdibujados al paso de la
procesión.