Para conseguir el título de Villa Exenta, se pagaron 3.800 ducados. Pero se opusieron diputados de La
Laguna y
Los Realejos que ofrecieron una cantidad mayor logrando una nueva carta real en mayo de 1650 que deja sin efecto la Real Cédula de 28 de noviembre de 1648. Ante esta situación adversa, Franchi y Alfaro redobló sus esfuerzos, haciendo puja por otros 3.000 ducados, consiguiendo e l 4 de diciembre de 1650 no sólo la confirmación de la carta real primitiva, sino también la prohibición de la nueva puja que pretendía hacer el cabildo.