La Perdoma es un pueblo muy pequeño de la isla de Tenerife, enclavado en el municipio de la Orotava. En el se esconden grandes y buenos valores, no solo humanos sino también artísticos, y este es el caso de mi padre Ezequiel de León y Dominguez Escultor, Pintor, Restaurador, Alfombrista, etc... Es curioso que siendo de un pueblo tan pequeño, él sea tan grande en su trabajo; declarado en el año 2001 en Sevilla, como uno de los mejores escultores vivos de escultura religiosa de España. Mas aún, es uno de los artistas mas grandes de Canarias y el escultor por excelencia número uno del siglo XX en toda la tierra Canaria. Actualmente no se le ha echo justicia a su labor, el cual a enrriquecido el patrimonio, no solo de la iglesia sino también de Canarias. Desgraciadamente los políticos no se acuerdan de esta gente, solo cuando se mueren. ¿Y para que luego? para anotarse un tanto, por mi parte que se los metan en..., que rica están las manzanas por la mañana en ayuna.Les recomiendo una antes de ir a trabajar.