Esta
ermita fue construida en el 1909 junto a un
calvario existente que era el calvario de la ermita de
San Joaquín del siglo XVII y situada junto a la primera
casa parroquial donada por los vecinos de
La Zarza a la
Parroquia de San Joaquín en el siglo XVIII. En ella se celebran las
fiestas de La
Virgen de La Zarza.
La
tormenta tropical Delta la dejó en grave deterioro, después de media década Cabildo de
Tenerife, Obispado y Parroquia presentan un proyecto para su restauración.
Está en la
calle Calvario y desde allí se tiene unas explendidas vistas, lo que hace también de esta visible desde muchísimos lugares, incluso se puede situar el lugar fácilmente desde la costa.