MASCA: Hola a todos No recuerdo con exactitud mi infancia...

Hola a todos
No recuerdo con exactitud mi infancia en ese maravilloso pueblo llamado Masca, es poco lo que llego a recordar, en vagas imágenes que permanecen en mi memoria, ayudada de unas cuantas fotos guardadas en un gran álbum. Era un pueblo pequeño, pero la clase de la escuela se llenaba, las daba un maestro que venia de Buenavista. La mayoría de los habitantes se ganaban la vida con sus animales y sus huertas, que con gran esfuerzo, pero con orgullo llevaban adelante. Porque si habéis estado en Masca, os daréis cuenta de que el terreno es muy abrupto y difícil de cultivar. Sólo unos pocos se emprendieron en el negocio de la hostelería. Hoy en día parece que el pueblo se basa en el turismo, hoteles, venta de artesanía, etc. Incluso algunos pocos, al irse sus hijos fueras, han reformado parte de la casa para alquilarla a visitantes que al día siguiente madrugarían para bajar al barranco. La juventud se ha ido, la agricultura ya no sé usa como medio de vida. Y no hay forma de alcanzar un buen nivel de vida sin sacrificio tras sacrificio ya que las autoridades oportunas no brindan las ayudas necesarias.
Mi familia en particular ha tenido que dejar el pueblo e irnos a vivir a la otra punta de la isla, ya que una familia tan grande en apenas 60 metros cuadrados , era muy complicado. Además de las posibilidades de trabajo del padre de familia. Por lo que nos ubicamos en tierras más fáciles.
Pero aún nos queda la pequeña casa y unos pocos terrenos (menos de los que teníamos ya que con el ensanchamiento de la carretera nos quitaron algunas partes) ocupados por unas cuantas zarzas y los pocos árboles que han sobrevivido. Usamos la casita para ir en épocas vacacionales o en alguna escapada de fin de semana, con gran esfuerzo de mi abuela, después de que casi se nos quemara la casa en uno de los incendios, le hemos devuelto la habitabilidad, ya que estuvo mucho años sin abrirse.
Realmente me siento privilegiada al tener un sitio al que escapar de la abrumadora ciudad, tan especial, tan lleno de encanto, y para mí que viví mis primeros cuatro años de la infancia allí, tan lleno de grandes significados, recuerdos y sensaciones.

Un saludo a todos los lectores, y en especial a los vecinos de Masca que lean mis modestas palabras.


L. Dorta.