En pleno centro del municipio
San Juan de la Rambla encontramos la
iglesia del Bautista, un
edificio religioso cuya construcción tuvo lugar en el siglo XVI. La iglesia tuvo que volver a ser reconstruida en 1797 después de que un huracán provocase daños importantes en su estructura. Destaca por sus muros blancos con
piedra viva que resulta tan característicos dentro de la
arquitectura canaria. Su interior posee una importante colección decorativa basada en pinturas cromáticas, imágenes de culto y
retablos.
Tenerife es una isla para viajar una y mil veces. Es casi imposible conocer todos sus
rincones en una sola visita. Más allá de sus grandes imprescindibles como el
Parque Nacional del Teide, los
parques rurales de Teno y Anaga, sus
playas, sus exóticos
jardines, cascos históricos como los de La
Laguna o
La Orotava y
pueblos costeros como
Garachico, el
Puerto de la Cruz o Candelaria, posee numerosos lugares no tan conocidos y con mucho encanto. Uno de mis favoritos es la Villa de San Juan de la Rambla, un municipio ideal para recorrer en un día: sin prisa, de forma relajada y disfrutando de cada momento.