La parte alta, desde el Barranco de Ruiz hasta la
Fuente de
La Guancha, entraba históricamente en la zona denominada Icod de los Trigos, pero el cambio de jurisdicción eclesiástica de la
Parroquia del
Realejo Bajo a la Parroquia de
San Juan Bautista propició que la zona fuera ligada a
San Juan de la Rambla. A finales del siglo XVIII la zona dejó de conocerse como Icod de los Trigos y empezó a ser conocida como San José gracias a la creación de la
ermita en honor al
Santo. En 1925, el Rey Alfonso XIII concede al municipio el título noble de Villa, pasando entonces a denominarse oficialmente Villa de San Juan de la Rambla. En la actualidad, San Juan de la Rambla,
puerta de la Comarca Noroeste de
Tenerife, ha experimentado una enorme evolución, no sólo a nivel poblacional (supera ya los 5200 habitantes), sino también en oferta comercial, turística, histórica y cultural. Su calidad de vida, clima y su
naturaleza variable, en pocos minutos se cambia de
playa a
monte, hacen que San Juan de la Rambla sea uno de los municipios referencia de Tenerife. La combinación cuidada entre vida costumbrista y moderna se presentan como un atractivo tanto para residentes como para visitantes.