Batalla de
Santa Cruz de Tenerife (1657). Ataque inglés al
puerto de Santa Cruz- Los
barcos mercantes españoles fueron abordados fácilmente por los ingleses; sólo los galeones de Egües y Centeno consiguieron oponer cierta resistencia, pero superados en número, a mediodía fueron incendiados por sus capitanes para evitar que fuesen tomados por los enemigos. Las fragatas inglesas intentaron tomar como presas los navíos abordados, pero perdida ya toda la flota española, la artillería arreció en su ataque contra los ingleses, y Blake dio órdenes de abandonar e incendiar todos los barcos españoles. A las 3 de la tarde, todos los navíos españoles habían sido destruidos y los ingleses comenzaron su retirada, que no pudieron completar hasta que al
atardecer, un cambio de viento les empujó
mar adentro; la fragata de Stayner, desarbolada y haciendo
aguas, hubo de ser remolcada. Resultados. Por la parte inglesa hubo 50 muertos y 120 heridos; los daños sufridos por las naves fueron reparados en los dos días siguientes. 27 Los ingleses se llevaron dos mercantes capturados, con carga de cuero y vajilla.