Lo que hoy conocemos por El
Sauzal fue un importante enclave en el
Tenerife prehispánico, según las investigaciones realizadas por el fundador del
Museo Arqueológico de Tenerife, Luis Diego Cuscoy. Las zonas costeras fueron los lugares escogidos por los guanches para sus asentamientos como lo demuestran las doce
cuevas de habitación halladas hasta ahora por los arqueólogos en este término municipal, en cuyo interior se encontraron fragmentos cerámicos decorados, lanzas largas, tabonas y esferoides de
piedra. Dentro de la Comarca, pasajes como el risco de
los Ángeles, la
Cueva de los Viejos y el barranco de
Cabrera de Acentejo eran otros de los emplazamientos escogidos por los indígenas. Hoy constituyen valiosos yacimientos para los científicos que tratan de rastrear las huellas de nuestros antepasados. Estos asentamientos forman parte del Menceyato de
Tacoronte. Muy cerca de la
ermita de los Ángeles, se encuentra la cueva de los Viejos, como tradicionalmente es llamada por las personas más antiguas del Municipio, aunque por su situación también se la conoce como cueva de Los Ángeles.