Luz ahora: 0,08867 €/kWh
Primero, fantástico Luis con tu relato de la Fiesta del Corazón de Jesús en Bielva, me ha encantado y me has enseñado detalles que no conocía, gracias una vez más. Éste foro es muy didáctico y se aprende mucho con la aportación gratuita de cuantos voluntarios así lo hacen, una maravilla.
Segundo, Toñu magistral tu exposición sobre otros de nuestros personajes históricos de Bielva como son Miguel Elordi y su mujer Loli, la del Arrudu, recordando esa sorna tan exclusiva de Miguel, fina y bien afilada con las palabras justas y precisas, puntería como nadie, sí señor. También recuerdo su camión Ebro, como él lo cuidaba con su mantenimiento continuo después de los recorridos que hacía en la recogida de leche por aquellas carreteras empedradas llenas de baches (nada de asfalto) donde vibraba hasta al último tornillo exigiendo un mantenimiento continuo para no quedarse tirado a la primera de cambio. Recuerdo aquel morru esbelto del Ebro. Yo no tuve la oportunidad de subir a la cabina, porque no tenía confianza con Miguel, pero observaba de lejos como él cuidaba su camión, gustándome ver las entrañas que existían debajo de aquel capo. Miguel sí que puede presumir de conductor de los auténticos, que manejaba aquel camión sin dirección asistida, con cambio a “pelo” que tenían que hacer hasta doble embrague para moverlo. Manejarlo por aquellas polvorientas y estrechas carreteras de piedra sin asfaltar era toda una aventura diaria. Buena gente Miguel.
De su mujer Loli también me acuerdo cuando estaba con su padre en el Bar Tienda del Arrudu. Coincido contigo que son caracteres complementarios que hacen buen equipo. Loli tiene una magistral mano izquierda para manejo del personal, será por su oficio desde cría, que consigue lo que se propone sin alterarse y con palabras convincentes, toda una inteligencia emocional. De sus hijos lamentablemente no los conozco y no recuerdo nada. A Miguel y Loli les estoy agradecido porque cuando mi hermano Antonio se quedó sólo en Bielva después del fallecimiento de mis tíos Pepe y Lucia, recuerdo que mi hermana Cionina me facilitó el teléfono del Bar Tienda de Loli y Miguel para dejar recado para hablar con Antonio y me consta que ellos estaban pendientes de mi hermano Antonio cuando se ponía enfermo o tenía algún problema, gente entrañable y merecedora de resaltar.
Segundo, Toñu magistral tu exposición sobre otros de nuestros personajes históricos de Bielva como son Miguel Elordi y su mujer Loli, la del Arrudu, recordando esa sorna tan exclusiva de Miguel, fina y bien afilada con las palabras justas y precisas, puntería como nadie, sí señor. También recuerdo su camión Ebro, como él lo cuidaba con su mantenimiento continuo después de los recorridos que hacía en la recogida de leche por aquellas carreteras empedradas llenas de baches (nada de asfalto) donde vibraba hasta al último tornillo exigiendo un mantenimiento continuo para no quedarse tirado a la primera de cambio. Recuerdo aquel morru esbelto del Ebro. Yo no tuve la oportunidad de subir a la cabina, porque no tenía confianza con Miguel, pero observaba de lejos como él cuidaba su camión, gustándome ver las entrañas que existían debajo de aquel capo. Miguel sí que puede presumir de conductor de los auténticos, que manejaba aquel camión sin dirección asistida, con cambio a “pelo” que tenían que hacer hasta doble embrague para moverlo. Manejarlo por aquellas polvorientas y estrechas carreteras de piedra sin asfaltar era toda una aventura diaria. Buena gente Miguel.
De su mujer Loli también me acuerdo cuando estaba con su padre en el Bar Tienda del Arrudu. Coincido contigo que son caracteres complementarios que hacen buen equipo. Loli tiene una magistral mano izquierda para manejo del personal, será por su oficio desde cría, que consigue lo que se propone sin alterarse y con palabras convincentes, toda una inteligencia emocional. De sus hijos lamentablemente no los conozco y no recuerdo nada. A Miguel y Loli les estoy agradecido porque cuando mi hermano Antonio se quedó sólo en Bielva después del fallecimiento de mis tíos Pepe y Lucia, recuerdo que mi hermana Cionina me facilitó el teléfono del Bar Tienda de Loli y Miguel para dejar recado para hablar con Antonio y me consta que ellos estaban pendientes de mi hermano Antonio cuando se ponía enfermo o tenía algún problema, gente entrañable y merecedora de resaltar.