Soy de
La Roda, y un aficionado a viajar. Marchar a
Galicia y encontrarte paisanos en Santiago, pasear por Gandía y ver conocidos, andar por
San José y ver a vecinos, trabajar en la
Sierra de
Cuenca y cruzarte con rodenses, salir del Bernabéu y ver un grupo de
amigos de tu
pueblo, hablar con otros amigos y siempre alguno conocer a alguien de La Roda. Ser rodeño es un orgullo, del que todos los que aquí vivimos presumimos.
Cuando regreso de esos viajes enfrentarme con el
Faro de la Mancha hace aflorar
... (ver texto completo)