Una vez estuve en las fiestas de Casasola y son muy divertidas. Hacen un montón de fogatas por la calle principal y ponen sartenes de trébedes para cocinar “carne al vino”, ¡con lo bueno que está allí el cordero!. Si vas, tienes que llevar un tenedor y, pagando un precio casi simbólico por la carne, te dan un trozo de pan para ir alrededor de las sartenes y pinchar trozos con el tenedor. Luego hay verbena.