Que asco da escuchar al consejero de justicia vasco, al Llamazares, a los portavoces de la república catalana, al pnv y al pse/psoe rasgándose las vestiduras por la decisión judicial reseñada en el comentario anterior. Atentan contra la conciencia ese
coro de voces escandalizadas ante el peligro de que el etarra consiga el propósito de suicidarse, onstinándose en no
comer.
¿Por qué tanta preocupación por un asesino en serie, cuando durante años esas voces defensoras del asesino no han dedicado
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