Este lugar tiene, además de belleza, un lado más misterioso. Es un lugar repleto de misticismo y leyendas, considerado un vórtice, un lugar en el que la energía fluye de una forma especial y, según parece, se dan cita fenómenos poco comunes y extrañas experiencias sensoriales. La leyenda del olmo, la
cueva de la encantá, en la que, se dice, aparece una mujer ante los senderistas que recorren el
camino o luces danzarinas con forma humana que de forma misteriosa aparecen en determinadas circunstancias son alguno de los mitos populares que se cuentan en el
pueblo. Si, como a mí, te apasiona este lado «más mágico»,
Riopar Viejo es tu sitio.