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ALDEA DEL REY (Ciudad Real)

Palacio de Calveria

Debemos agradecer al jardinero de las nubes que se haya abierto un lugar de comentario para que todos los aldeanos puedan dar su opinión.

Por cierto, debo decir que estoy de acuerdo en parte de las aportaciones que hace. De todos modos Aldea necesita una persona joven de alcalde que mueva el pueblo. Nos desilusiona verlo cada vez peor. El pueblo no es de nadie en particular.

¡Levantaos aldeanos! ¡superar vuestros miedos! Dar la oportunidad a otras personas. Es muy fácil decir que otros lo harían ... (ver texto completo)
Insisto que demuestres que son mentiras, puesto que tú no demuestras que no lo sean.
Si te escuece, rascate con la mano derecha.
Amigo:
Quien tiene que demostrar lo que dice es el que esconde parte de la información dejándola a medias y conviertiéndola en una mentira. No tiene que demostrar la verdad el ofendido eso pasa, creo yo, en las dictaduras. En las democracias occidentales el que acusa a alguien es el que tiene que demostrar aquéllo que dice. ¡Faltaría más¡De lo contrario cada dos por tres tendrían que desmentir continuamente algunas personas comentarios que hacen de él.
Un forista.
Pues demuestra tu que es falso, porque desprestigias a los que a tu entender mienten o difaman.
Uno que esconde la mano y que lee tammien el foro.
Las verdades a medias son una mentira. Y a eso es a lo que nos tienen acostumbrados algunos de los señores que escriben en estos foros. Tiran la piedra y esconden la mano. A lo peor, cuando se quieran dar cuenta quedan como mentirosos al comprobar que lo que dicen y argumentan en sus escritos es falso. Pero, claro, con ello desprestigia o difama ... Que algo queda.
Uno del foro.
Si alguien conoce casas o pisos que se puedan alquilar en el pueblo, hacer el favor de escribirlos en este foro.Hay gente que quiere hacerlo.Gracias.
En la campaña electoral del 99 los populares esgrimían como argumento irrebatible la "gratuidad" de Ramón frente al sueldo elevado de alcalde que el consistorio aldeano habría de deselbolsar en caso de que prosperase la candidatura de Santiago. Parece que ahora ese argumento deja de existir para aquéllos, y tanto Luis María como Miguel han reclamado para sí unos sueldos crecidos, en consonancia con su "crecida" categoría.
Muy bien, cada uno ha de mantener nivel de vida que ha conquistado en este valle de lágrimas, pero no utilicéis argumentos que en el futuro se puedan volver espadas de doble filo para vosotros. Ya lo dice un proverbio inglés: "Cuando tú señalas con el dedo, no olvides que hay tres dedos que te están señalando". Y he aquí la paradoja de que los presuntos alcaldes populares resultarían carísimos para nuestra modesta aldea (en número de habitantes, se entiende). Y la competencia que pudieran mostrar los aludidos en el ejercicio de alcalde, me resulta personalmente muy dudosa. No olvidemos que ellos pertenecen a la esfera de los inocentes, los potajes y los jerónimos, que son las familias que más han coadyuvado en el sostenimiento de la estructura cuasi-feudal en que se debate el pueblo desde los últimos decenios del pasado siglo. Y el pueblo se merece sacudirse tan pesaroso yugo.
No soy socialista, pero lamento que Santiago no defienda su candidatura. Ha sido una víctima de la hipocresía del pueblo, precisamente porque él no es hipócrita y no va repartiendo por ahí sonrisas de aceite de almendras para luego asestar puñaladas traperas. Siempre se ha asociado con soberbia su timidez y su solemnidad. No es amigo de bares, y ése es un rasgo casi imperdonable en un pueblo como Aldea. Le gustan los libros y el deporte, y semejantes apegos despiertan todavía desconfianza en cierto sector aldeano.
Sea como fuere, Santiago ha dejado con su retirada una vacante díficilmente asumible por muchos de su agrupación, porque hay que decir en justicia que algunos de éstos no dan en absoluto la talla, y la mejor baza que pueden jugar es ofrecer un papel representativo a las mujeres de sus filas, las cuales pueden tomar con acierto el testigo de la esperanza que Santiago representaba para el pueblo... Pero me gustaría que vieran que Dios no está exclusivamente del lado de los caciques y de los corruptos (que en función del inmenso amor por sus criaturas, lo está sin asomos de dudas), sino también y especialmente del lado de la gente humilde. Dios ama a todos por igual, incluso a ti, Santiago; no lo dudes.
Una alcaldía es una cosa muy seria, y los aldeanos deben reflexionar seriamente lo que van a hacer con la misma.
El jardinero de las nubes. ... (ver texto completo)
Atención, Atención, señores del Foro cuando entramos en este apartado pone" Palacio de la Calvería" y no " Palacio de la Clavería" como debería poner porque fue la residencia del Clavero de la Orden, que era el encargado de las llaves de la misma. Gracias y corregirlo, por davor.
A mi me pasa igual, no todos los comentarios que he escrito se ven reflejados en el foro.
Feliz Navidad a todos!!!
Fdo:Bastet.
Quisiera saber por qué no aparecen todos los comentarios que se escriben. Alguien ha quitado una aportación que realizaba anoche y que ha durado muy poco. No sé quien tiene la capacidad para quitarlo pero me parece una tomadura de pelo el que siempre salgan las mismas personas y sus comentarios y los del resto no.Un forista.
Una idea para hacer en el Palacio cuando lo arreglen: un hotel con habitaciones para visitantes, con un buen restaurante donde después de ver el castillo uno pueda ir al Palacio a cenar y descansar tranquilamente.
Estimado señor alcalde : Como quiera que usted ha hecho de su vida una actuación pública, política y religiosa, se encuentra por consiguiente sometido a las críticas del que suscribe, persona igualmente criticable. Notoriedad, notoriedad, notoriedad..., sobre este trípode tan variopinto se han apoyado todos sus afanes en Aldea. Es bello el tañido de las campanitas navideñas: din, don, din, don, din, don; pero usted siempre ha preferido el ronco repicar de los cencerros caprinos: don, don, don, don... Pero poniendo como áurea coda, eso sí, el superlativo de ramo, que así es como se constituye su patriarcal nombre de pila.
No le negaré el impulso que dio en tiempos pretéritos a la cultura aldeana, haciéndose cargo de abrir y cerrar la entonces rudimentaria biblioteca aldeana y de permitirme cumplir el Evangelio en eso que dice de buscar los últimos bancos de la iglesia, pues usted, muy amablemente y con gran dolor de su alma, se plegaba a ocupar siempre los primeros bancos (no fuera que Dios, al que ambos amamos, se lo tuviese en cuenta). Y luego los provechosos seminarios de historia que nos procuraba, al mostrarnos diariamente y hasta la presente, en el mismo ámbito aldeano, los sentimientos que allá por los 30 causaron la escisión que degeneró en la Guerra Civil. Es triste tener que poseer y necesitar de un lado izquierdo en todos los aspectos de la existencia.
Capítulo aparte merece su docto magisterio en tiempos del silogismo "la letra con sangre entra", si bien usted puede vanagloriarse de no haber derramado jamás sangre ninguna. Todo lo más, en esos tiempos de tan magras calefacciones, usted ha calentado su mano (derecha eso sí), tocando beatificamente las mejillas de los ardorosos alumnos. Ya lo decía Víctor Hugo: "En los ojos del joven arde la llama, en los del viejo brilla la luz". Y como buen profesor de religión, no podía dejar de enseñar un libro de la Biblia tan importante como es el de los Proverbios, sobre todo en lo que a su capítulo 23, versículos 12 a 14, concierne. Y tan sabio magisterio había de tener sus ecos, pues me consta que un alto mandatario del colegio ha aplicado en fechas recientes tan sabias lecciones de calientamanos (aunque después se arrepintió, cosa que le honra). Y aquello del ateneo Luis Molina y demás parafernalia, que hizo de usted y, de rechazo, de todos los aldeanos objeto de risión y regocijo fuera del alfoz del pueblo.
Y su humildad nunca parangonada, al asumir dolorosamente el duro trance de prestar su nombre a la residencia de ancianos. Por no mencionar aquella disputada campaña electoral del 99, cuando echó mano de altavoz y aportó datos bastantes para iniciar su proceso de beatificación y posterior subida a los altares para cuando usted nos deje huérfanos de su presencia, que ojalá sea lo más tarde posible.
Después de tan agitada actividad, necesita un merecido descanso y dejar que nueva savia circule por el árbol aldeano. Y de paso llévese a sus diligentes satélites, no sea que actúen a manera de trombos en los vasos leñosos y liberianos de nuestro hermoso árbol aldeano.
Por último, mi gratitud al haber traído una tranquilidad de balneario a nuestras calles, habiendo propiciado la fuga del exceso de población.
Cordialmente suyo,
El jardinero de las nubes. ... (ver texto completo)
Ayuntamiento de aldea del rey que no se derrumbe el palacio de claveria por dios hacer algo mi madre estudio en el palacio. Barcelona.
Que hagan algo con el Palacio de Claveria ya!!!es una pena que nadie haga nada por recuperar parte de la historia del pueblo.
Yo lo tengo claro: en el ayuntamiento hay una tremenda parcialidad. Prima el clientismo político. Si se espera que las cosas cambien, hay que conseguir que cierta "gentecilla" se marche de allí, incluidos ciertos funcionarios, alguno de los cuales se jactaba en tiempo pasado de saber con mucha antelación lo que le iban a preguntar en el examen de oposición. Aunque bien es cierto que este último caso es de los funcionarios más competentes que tiene el consistorio aldeano actualmente.
Sin embargo, ... (ver texto completo)