ALDEA DEL REY: Figaro. Las reglas del juego las sabes tú, las sé...

Figaro.

Las reglas del juego las sabes tú, las sé yo, y las saben todos. Son las normas sociales y judiciales. Si se consigue, sin transgredir estas normas, lograr "jugar" en la vida, la vida vale realmente la pena.

Jugar no significa hacer daño a los demás, ni reírse de los demás, ni aprovecharse (parasitar) de los demás. Jugar no está exento del respeto a los semejantes. Jugar es aprovechar todo lo que tenemos a nuestro alrededor para gozar. Pero claro, hay que saber jugar.

Y saber jugar requiere de un equilibrio, que no es más que el sentido común. No puedes gastarte, por ejemplo, 18.000 euros en un viajito de nivel a Australia, si lo que cobras son 21.000 al año, porque el resto del año vas a tener problemas para comer.

Podrás beberte una botella de vino, comiendo, algún que otro día, pero si te la bebes cada día, el hígado dará fin al "juego" en cuanto menos de lo esperes.

Jugar es una actitud. Es hacer de la vida, en la medida de lo posible, una existencia lúdica. Y para ello se requiere de grandes dosis de amor hacia los demás (a quién se lo merece), de buen humor, y de libertad (que no de libertinaje).

EXTRABARNA.