No busques el exito menospreciando a los demas.
No digas nunca palabras hirientes; hieren a los demas, pero mas te hieren a ti mismo; sales tu mas perjudicado y te rebajas.
No seas jactancioso; tienes cualidades, pero tambien las tienen los otros.
Entierra el hacha, envaina la espada, esconde el martillo; nadie se ha elevado menospreciando a los demas, sin negar los tuyos y sin enorgullecerte por lo que Dios te dio; al fin y al cabo todo merito es nada mas que de Dios, que es la fuente de todo bien.
No digas nunca palabras hirientes; hieren a los demas, pero mas te hieren a ti mismo; sales tu mas perjudicado y te rebajas.
No seas jactancioso; tienes cualidades, pero tambien las tienen los otros.
Entierra el hacha, envaina la espada, esconde el martillo; nadie se ha elevado menospreciando a los demas, sin negar los tuyos y sin enorgullecerte por lo que Dios te dio; al fin y al cabo todo merito es nada mas que de Dios, que es la fuente de todo bien.