Aunque queden españoles mezquinos y aldeanos con cerebro de lombriz como el que da Vivas a Franco, lo cierto es que la Ley para la Recuperación de la Memoria Histórica y el Juez Garzón están restituyendo el honor y el buen nombre a tantísimos españoles y españolas ajusticiados miserablemente por un tirano de pacotilla que la historia debe borrar de sus anales, empezando por derruir el Valle de los Caídos que, por cierto, se está cayendo a trozos y que espero el Gobierno Socialista ponga la piqueta a lo poco que va quedando y lo reduzca a polvo, a nada.
Perdón por la introducción porque mi sentimiento hoy es de eterna gratitud a hombres como el abuelo de Feliciano Moya, gratitud, reconocimiento, respeto y cariño por ser defensores del orden constitucional contra los golpistas (¡Ay, aldeanos de cuerpo medio, que no os enteráis!) que derribaron, machacaron e hicieron desaparecer los valores democráticos durante 40 años en nuestro querido país. Y esto que es tan evidente, parece ser olvidado por quienes, aunque no lo reconozcan abiertamente, estarían encantados con otro dictador de similar o peor pelaje (y existir existen... incluso con barniz de demócratas)
Enhorabuena de todo corazón a los familiares de Feliciano y a él mismo que, solo y con su trabajao honrado, está haciendo más por este pueblo que todo la caterva de inútiles mezquinos que, incapaces de otra cosa, se han tirado al monte del bolsillo ajeno. Felicidades por vuestro tesón, vuestra paciencia, vuestro tiempo dedicado a indagar y buscar a vuestro familiar. Dios es justo y os lo devuelve, tantos años después, para descansar en su tierra para que, los que nunca olvidamos lo que ellos hicieron por este país, vayamos a visitarlo y hacerle compañía llevándole una rosa, cuando nos dé la gana.
Perdón por la introducción porque mi sentimiento hoy es de eterna gratitud a hombres como el abuelo de Feliciano Moya, gratitud, reconocimiento, respeto y cariño por ser defensores del orden constitucional contra los golpistas (¡Ay, aldeanos de cuerpo medio, que no os enteráis!) que derribaron, machacaron e hicieron desaparecer los valores democráticos durante 40 años en nuestro querido país. Y esto que es tan evidente, parece ser olvidado por quienes, aunque no lo reconozcan abiertamente, estarían encantados con otro dictador de similar o peor pelaje (y existir existen... incluso con barniz de demócratas)
Enhorabuena de todo corazón a los familiares de Feliciano y a él mismo que, solo y con su trabajao honrado, está haciendo más por este pueblo que todo la caterva de inútiles mezquinos que, incapaces de otra cosa, se han tirado al monte del bolsillo ajeno. Felicidades por vuestro tesón, vuestra paciencia, vuestro tiempo dedicado a indagar y buscar a vuestro familiar. Dios es justo y os lo devuelve, tantos años después, para descansar en su tierra para que, los que nunca olvidamos lo que ellos hicieron por este país, vayamos a visitarlo y hacerle compañía llevándole una rosa, cuando nos dé la gana.