SOLO he leído por encima, cuanto se dice hoy. No hay duda de que el Domingo para alguno; ha sido un caminar hacia lo profundo... cosa que me alegra. FLOR es una flor mas a tener muy en cuenta, en sus amenos e instructivos relatos. Su entrañable modo de hacer, hoy. me colma y me traslada.
Bueno, la verdad es que, hoy, mientras me zambullía en el baño, mirando hacia el techo fijamente, me he sentido un poco culpable. ¿Porqué?- Me he preguntado. Y de este "porque"
ha nacido mi "cuento". que sin duda merecerá una continuación, por considerar no tener fin.
Bueno, si, el abuelo, como casi todos es a veces un poco gruñón, dependiendo de que y del momento. El abuelo, pese a todos los golpes recibidos,-físicos y de los otros- goza de un equilibrio mental, que para si muchos lo quisieran. En cuanto a lo físico- nadie lo diría- aún puede corretear... de hecho aún lo hace de vez en cuando.
Convendría pues, pensar que el abuelo goza de excelente salud física y mental, y que aunque a veces se muestra dicharachero, otras, se encierra en su silencio... ¿Gruñón? ya lo hemos dicho. Para quienes le conocen a fondo, y su trayectoria, dirían; mucha entereza a estas alturas de sus canas.
Hace un día gris. El abuelo aún no lo sabe. Si oye el viento que ruge en la ventana. Hoy no habrá paseo hasta el parque, se está diciendo, mientras da cuenta del desayuno, que el mismo se ha preparado. Hace no mucho, me lo preparaba ELLA, se dice algunas veces y como ahora, se dibuja en su rostro una lo que parece una sonrisa de tristeza...
! Buenos días abuelito!
! Buenos día pequeña! Y arrima una silla y luego prepara el desayuno para la pequeña: lo hace casi siempre.! Asi! ya está_ dice mientras se dirige a la mesa y tomando asiento, le mira fijamente... adivina una pregunta.
Dime abuelo: ¿es cierto que en un país muy lejano los niños no tienen que comer?
El abuelo, sorprendido, solo asiente con un movimiento de cabeza. Luego se levanta y mientra se dirige a la ventana grande... otra pregunta:
¿Tampoco tienen juguetes?- Y otra: ¿porque está tan delgados y tan tristes?
El abuelo aparta las cortinas de sus manos. Creo que va a llover- dice y añade- hoy no habrá parque, no ignorando que la nieta hoy tendría muchas preguntas. Sintió la mano de la pequeña sobre la suya y la tomo con ese afecto que profesaba a la pequeña..."Yo también hacía muchas preguntas a tu edad, se decía para sus adentros.
Abuelo, hace unos días, unas gentes, mostraban en la televisión unos niños muy tristes y hablaban de ellos y no tenían juguetes, y...
Pasan hambre, y mueren sin haber aprendido a vivir. se dice el abuelo para sus adentros, mientras la mano de la pequeña le insta a respuestas.
! Ya estás, con tus historias!- grita una voz en el fondo del salón- Era la madre de la niña- El abuelo se encogió de hombros... Mientras mamá en tono de mal humor, decía:
a tu cuarto a jugar con tus muñecas. Y tu-
se dirigía a su padre- deja de contar tus historias. ya las aprenderán, cuando sean mayores.
Calló el abuelo, mientras pensaba que debería de decir a su hija, que aún ella no las había aprendido, y...
! Pero mamá, yo solo quería saber si...!
A tu cuarto. Te digo que basta, quiero hablar con el abuelo.
La niña, lloraba por que no entendía que mal había en sus preguntas. La niña lloraba, porque solo el abuelo y sus juguetes la escuchaban. Se consoló diciéndose: mañana, seguro que el abuelo me cuenta algún hermoso cuento.
Abajo se oían las voces de mamá riñendo al abuelo...! pero si el abuelo no ha contado nada!- se repetía la niña. Tiene mas años que mamá y por tanto tiene que saber mas coas que ella.
Paso mucho rato sin jugar con su muñecas. luego se dijo que ellas no tenían la culpa. Y dirigiéndose a ellas decía:
Mama solo se ocupa de sus cosas, yo siempre os cuento todo. Seguro que el abuelo, no me reñiría por que yo os confíe mis secretos. Pero mama...
Habían cesado las voces.
Mamá estaba en la cocina-
El abuelo miraba tras los cristales y su recuerdo, volaba a través del cielo gris. lejos, muy lejos. Su memoria le decía que ALLÍ tampoco hubo juguetes, pensaba y ni tan siquiera se dió cuenta de que una paloma, luchaba con el viento, y buscaba posarse en algún lugar. Hoy ha amanecido un día triste, se decía mientra con el revés de su mano, aplastaba, mas que limpiaba una lágrima rebelde. Luego sonrió mientra pensaba como contar este cuento a su nieta, y, en que sería un secreto entre los dos-
La nieta, en el piso de arriba, también sonreía afanosa, colocando en una bolsa las muñecas que encargaría al abuelo, les diera a aquellos niños.
Será un secreto, también pensó.
JM (LIBERTAD)
Bueno, la verdad es que, hoy, mientras me zambullía en el baño, mirando hacia el techo fijamente, me he sentido un poco culpable. ¿Porqué?- Me he preguntado. Y de este "porque"
ha nacido mi "cuento". que sin duda merecerá una continuación, por considerar no tener fin.
Bueno, si, el abuelo, como casi todos es a veces un poco gruñón, dependiendo de que y del momento. El abuelo, pese a todos los golpes recibidos,-físicos y de los otros- goza de un equilibrio mental, que para si muchos lo quisieran. En cuanto a lo físico- nadie lo diría- aún puede corretear... de hecho aún lo hace de vez en cuando.
Convendría pues, pensar que el abuelo goza de excelente salud física y mental, y que aunque a veces se muestra dicharachero, otras, se encierra en su silencio... ¿Gruñón? ya lo hemos dicho. Para quienes le conocen a fondo, y su trayectoria, dirían; mucha entereza a estas alturas de sus canas.
Hace un día gris. El abuelo aún no lo sabe. Si oye el viento que ruge en la ventana. Hoy no habrá paseo hasta el parque, se está diciendo, mientras da cuenta del desayuno, que el mismo se ha preparado. Hace no mucho, me lo preparaba ELLA, se dice algunas veces y como ahora, se dibuja en su rostro una lo que parece una sonrisa de tristeza...
! Buenos días abuelito!
! Buenos día pequeña! Y arrima una silla y luego prepara el desayuno para la pequeña: lo hace casi siempre.! Asi! ya está_ dice mientras se dirige a la mesa y tomando asiento, le mira fijamente... adivina una pregunta.
Dime abuelo: ¿es cierto que en un país muy lejano los niños no tienen que comer?
El abuelo, sorprendido, solo asiente con un movimiento de cabeza. Luego se levanta y mientra se dirige a la ventana grande... otra pregunta:
¿Tampoco tienen juguetes?- Y otra: ¿porque está tan delgados y tan tristes?
El abuelo aparta las cortinas de sus manos. Creo que va a llover- dice y añade- hoy no habrá parque, no ignorando que la nieta hoy tendría muchas preguntas. Sintió la mano de la pequeña sobre la suya y la tomo con ese afecto que profesaba a la pequeña..."Yo también hacía muchas preguntas a tu edad, se decía para sus adentros.
Abuelo, hace unos días, unas gentes, mostraban en la televisión unos niños muy tristes y hablaban de ellos y no tenían juguetes, y...
Pasan hambre, y mueren sin haber aprendido a vivir. se dice el abuelo para sus adentros, mientras la mano de la pequeña le insta a respuestas.
! Ya estás, con tus historias!- grita una voz en el fondo del salón- Era la madre de la niña- El abuelo se encogió de hombros... Mientras mamá en tono de mal humor, decía:
a tu cuarto a jugar con tus muñecas. Y tu-
se dirigía a su padre- deja de contar tus historias. ya las aprenderán, cuando sean mayores.
Calló el abuelo, mientras pensaba que debería de decir a su hija, que aún ella no las había aprendido, y...
! Pero mamá, yo solo quería saber si...!
A tu cuarto. Te digo que basta, quiero hablar con el abuelo.
La niña, lloraba por que no entendía que mal había en sus preguntas. La niña lloraba, porque solo el abuelo y sus juguetes la escuchaban. Se consoló diciéndose: mañana, seguro que el abuelo me cuenta algún hermoso cuento.
Abajo se oían las voces de mamá riñendo al abuelo...! pero si el abuelo no ha contado nada!- se repetía la niña. Tiene mas años que mamá y por tanto tiene que saber mas coas que ella.
Paso mucho rato sin jugar con su muñecas. luego se dijo que ellas no tenían la culpa. Y dirigiéndose a ellas decía:
Mama solo se ocupa de sus cosas, yo siempre os cuento todo. Seguro que el abuelo, no me reñiría por que yo os confíe mis secretos. Pero mama...
Habían cesado las voces.
Mamá estaba en la cocina-
El abuelo miraba tras los cristales y su recuerdo, volaba a través del cielo gris. lejos, muy lejos. Su memoria le decía que ALLÍ tampoco hubo juguetes, pensaba y ni tan siquiera se dió cuenta de que una paloma, luchaba con el viento, y buscaba posarse en algún lugar. Hoy ha amanecido un día triste, se decía mientra con el revés de su mano, aplastaba, mas que limpiaba una lágrima rebelde. Luego sonrió mientra pensaba como contar este cuento a su nieta, y, en que sería un secreto entre los dos-
La nieta, en el piso de arriba, también sonreía afanosa, colocando en una bolsa las muñecas que encargaría al abuelo, les diera a aquellos niños.
Será un secreto, también pensó.
JM (LIBERTAD)
! Pues si! Gracias moderador: a pasado mi cuento, pese a mi lucha, con el tiempo con que cotaba: la luz se marchó,, la pantalla después se había reducido. busqué con el ratón los motivos, se me escapaban las musas. Sobre una cuartilla, marcaba mi idea... y así extraviado en ellas hasta el final, regreso a Aldea, y lo encuentro, algunos retoques u a mi carpeta, esa que uso desde hace años.
Si, mis amigos, aquí en Toledo, hoy hace viento. Llueve de forma intermitente, por lo que hoy no tengo paseo...
Por supuesto tampoco está mi nieta, ni es día para pasearla por el parque... si para contaré este"cuento" en la certeza de que con algunos adornos le gustará. Gracias.
Si, mis amigos, aquí en Toledo, hoy hace viento. Llueve de forma intermitente, por lo que hoy no tengo paseo...
Por supuesto tampoco está mi nieta, ni es día para pasearla por el parque... si para contaré este"cuento" en la certeza de que con algunos adornos le gustará. Gracias.