Ofertas de luz y gas

ALDEA DEL REY: Menos mal que nos queda Cospedal ...

Menos mal que nos queda Cospedal
No falla. Cada vez que el Gobierno se encuentra en un momento de crisis o encadena una racha de reveses, mitad circunstanciales mitad provenientes de una gestión errática y atolondrada aparece en escena la inefable secretaria general del Partido Popular para decir unas palabras que se transforman, automáticamente, en oxígeno vivificador y corrientes de simpatía para Zapatero y los suyos. (Algo así como cuando hablan Chocho o Chufi en su pptania aldeana de nuestros bolsillos)
María Dolores de Cospedal, siempre al rescate, no ha vuelto a fallar a quienes esperan tanto de ella y, sin pensárselo dos veces, ha venido a atribuir al Gobierno la responsabilidad por el secuestro de los tres cooperantes españoles en Mauritania, al margen de la culpabilidad de Zapatero porque la Tierra gire alrededor del Sol). La número dos del PP no debe conocer la importancia del matiz ni lo que supone la responsabilidad de ejercer la oposición. De lo que se trata, debe pensar, es de arrear estopa al adversario y desde esa perspectiva no se para en barras ni deja atisbar un deje de grandeza política ante situaciones tan dramáticas y comprometidas como la suerte que puedan correr nuestros tres compatriotas secuestrados en el Magreb, o el Alakrana, hace unos días. (Pero si hubiera que alzar una pancarta contra ZP, allí estaría la primera) Y no es la primera vez, ni será la última, que la presunta candidata a presidir a los castellano manchegos mete la pata hasta la nalga. Veamos:
Este verano, ante las plácidas playas de Marbella, Cospedal dio en convocar a las cámaras de televisión para denunciar un supuesto delito de escuchas ilegales perpetrado por el Gobierno de España al interceptar conversaciones telefónicas mantenidas por responsables del Partido Popular. El cariz de la acusación era tal que, de ser cierta, hubiera merecido un marco con mayor prestancia. En lugar de un escenario de pareo y sombrilla, hubiera sido más pertinente convocar formalmente a los medios en la sede nacional del partido y exponer, con su denuncia, las evidencias probatorias necesarias para sustentar una acusación de tamaña gravedad. (Como se sabe, al ser todo puro invento, no fue otra cosa que irar la piedra y esconder la mano)
No hubo nada de lo denuncia ni, en realidad, nada de nada. Después del consiguiente follón mediático en el apacible ppagosto, los populares no siguieron adelante con la denuncia, cuya promotora nunca pudo probar, y nadie pidió responsabilidad alguna por tal desatino impropio de un partido que aspira legítima e ilegítimamente a gobernar el país. Cospedal tiró la piedra y escondió la mano, sin ser consciente de que lanzó contra el Gobierno una de las más graves acusaciones que pueden formularse en democracia, ¡y a los corruppes qué? A fecha de hoy no consta que, abochornada por su ligereza y atormentada por la frivolidad de la que hizo gala, presentara su dimisión ni tampoco que nadie se la pidiera, el despido se lo daremos los castellano manchegos dentro de una año y medio, sin lugar a dudas.
Pero, inasequible al desaliento, como los de Alí Babá en Aldea, ahora nuestra protagonista vuelve a las andadas y aprovecha un río turbio y revuelto para difundir ante la opinión pública un mensaje perverso: si los terroristas de Al Qaeda secuestran a ciudadanos españoles es porque saben de la debilidad de la diplomacia española y, por ende, del Gobierno y su presidente. No se trata de que el terrorismo islamista actúe cuando puede ni tampoco de que haya, afortunadamente, más cooperantes españoles que nunca por el mundo. No, la culpa es de Zapatero y de Moratinos que no son lo suficientemente firmes.
Claro, con el servilismo aznarita de perro faldero, parecería que Bush sí exhibía esa firmeza y los terroristas atacaron el corazón de los Estados Unidos el 11 de septiembre de 2001. Aznar, como se dice, tampoco se quedaba atrás y Madrid sufrió el horror del 11 de marzo de 2004. Londres no ha sido nunca un país comprensivo con los asesinos y sufrió los terribles atentados en cadena del 7 de julio de 2005. Y Rusia, país duro entre los duros con el terrorismo, vivió el ataque al teatro Dubrovka en 2002. No parece, por tanto, que ése argumento se sostenga a la evidente luz de tan luctuosos hechos.
La impropia ligereza de María Dolores de Cospedal es tan proverbial como inadmisible. Su incapacidad para asumir cabalmente el cargo que ocupa queda de manifiesto en cuantas ocasiones tiene oportunidad de demostrarlo, que son muchas. En el fondo, y a pesar de tal cúmulo de torpezas, el PSOE debe de estar profundamente satisfecho de que las desmesuras cospedalianas sirvan para generar apoyo entre los que exhiben opiniones críticas con las actuaciones del Gobierno. ¡”Menos mal que nos queda Cospedal”!, piensan los socialistas, no faltos de razón, cuando la aspirante a noble abre la boca.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
! Como no, muchacho! "La Cospedal" (" el DE" es un añadido a lo que parece, no se si por que suena bien, a sus oídos, y a algunos otros) heredera, de quienes, azotan a la izquierda desde principio a fin, sale a la palestra, para hacerse oír de sus fieles... sus mas allegados, y otros que a lo que parece, les agradan sus discursos. Estos días, yo esperaba, escuchar de su boca, que la nevada caída, era culpa de Zapatero, y tras el de estos progres, que "todo lo hacen mal"... desde el 11 M en adelante. ... (ver texto completo)
Era mi intención de responder, sobre religión, "sus logros" o fracasos: Sus buenas intenciones, y la desbandada, que traduzco, que siendo la Tierra de todos, el mas fuerte saca el mejor partido. Por este motivo, yo también califico de mensajes perversos lo de La Cospedal, muy dispuesta, a sacra la mas leña posible del árbol caído. A mi, verán ustedes, me inquietan, las palabras que no construyen y si destruyen, máxime ante los hechos, de que esta señora aspirante, a dirigir nuestra comunidad, tiene ... (ver texto completo)