AL PAISANO, ESE VALIENTE
Me llamo Ángel López y vivo en la calle Real, para más señas. Cualquiera que haya pasado por Aldea me conocerá, indistintamente de la opinión que cada uno tenga de sí y de los demás. Nunca he escrito nada en este foro, al que sin embargo leo a diario. Amigos foristas, os pido un poco de paciencia y atención por lo extenso que pueda parecer esta colaboración, pero es que merece la pena poner las cosas en su sitio.
Desde hace unos días, un tal “Paisano” ha empezado a dar la vara a otro tal “Trobador”, pero con tal mal tiento que, pensando que yo soy éste, está volcando y vociferando asuntos que me atañen personalmente y que quiero aclarar, y si es tan valiente el tal “Paisano”, así como yo pongo mi nombre, que él lo haga también y nos vamos los dos al Juzgado de Guardia y, pasados unos meses, un Juez dará o quitará la razón. Así de claro.
Veamos: en lo que deja traslucir de las asignaciones que se me hayan realizado por parte del Ayuntamiento para las adjudicaciones de Piscina, eventos varios como Fiestas locales o patronales, San Jorge, Carnaval, Navidad, etc. etc., he de informarle que, siempre y sin excepción, he concurrido al concurso público del Pliego de condiciones abierto a todo el mundo. He subastado como todo el mundo y, cuando lo he hecho por la mayor cantidad, se me ha adjudicado con total transparencia. En cuanto al pago de las cuotas y devengos o finiquitos de los servicios adjudicados, todos, absolutamente todos, Sr. Paisano, están liquidados con el Ayto., y si usted conoce alguno que no lo esté, entonces denuncie al Ayuntamiento por no cobrar lo que debe; dicho sea de paso, y aunque hay mucho que cortar, el Ayto. ha cumplido siempre con el pliego de condiciones ofertadas, así como yo con las obligaciones a que me he comprometido al ser el adjudicatario del o de los servicios. ¿Enterado? Obvio resulta, como puede apreciarse, -y le podría dar la cifra exacta de los pagos de cada adjudicación con el resguardo bancario de ingreso, que a mí el Ayuntamiento de Aldea “no me ha dado nada, nada de nada”.
En cuanto a eso de pasar la vida “parado”, esperando la jubilación, también tengo que aclararle que pago mis impuestos muy religiosamente; que, en efecto, desgraciadamente mi trabajo es un tanto discontinuo y, debido a la esencia del mismo –contratas y subcontratas- son frecuentes los períodos de inactividad laboral, unas veces mayores otras menores; en cualquier caso, poco le importa a Vd., que tal vez ande viviendo de la sopa boba y por ello disponga de tanto tiempo. Más vergonzante resultan esas “pensiones” de por vida a hombres sanos como robles concedidas porque en un momento determinado tuvieron “un problema”, y la solución la tenemos que andar pagando todos los demás el resto de su vida, y a lo mejor Ud. no anda muy lejos.
En cuanto a mi “actividad política”, también veo que le preocupa. No se inquiete, el PSOE local tiene excelentes representantes aquí y fuera. No seré yo candidato, pero no le quepa la menor duda de que los apoyaré siempre y en cualquier circunstancia, quitándome y poniéndome la chaqueta por ellos, pero no cambiándomela, que de eso sabrá Ud. y el partido al que defiende mucho más que yo.
Para ir terminando, y puesto que hace referencia al asunto del “Casino”, parece usted saber mucho más que cualquier mortal aldeano, por lo que es fácil deducir que también anda al lado de la teta; pues bien, como ya le indiqué al Sr. Alcalde, estaría interesado en optar a la regencia de la barra del Casino o lo que sea ese edificio, siempre que las condiciones económicas y de arriendo fueran asumibles, en igualdad de condiciones con cualesquiera otras personas que tuvieran interés en la misma explotación, ni más ni menos. No derive hacia mí las técnicas que Vd. bien sabe utilizan otros tan cercanos a la administración local y por las que nos hemos hecho tristemente famosos en demasiados lados.
Una última cosa me queda por añadir y es que, aunque Vd. no lo haya hecho jamás, muchos, muchos aldeanos, incluidos algunos dirigentes de su partido político, me han felicitado reiteradamente por el servicio ofrecido tras la barra del bar, y no en una sola ocasión. Y lo siguen haciendo hoy día, así es que, como bien dice el refrán, y aunque a Vd. le fastidie: “Algo tendrá el agua cuando la bendicen”, ¿no?
Y para terminar, no me queda más que aconsejarle que, si tiene dudas, antes de meter la pata hasta el gollete y provocar una situación que bien le podría costar un disgusto o algo más, consulte la documentación, asesórese, tenga la seguridad de que puede demostrar lo que dice, porque si no, Sr. Valiente, le puede salir el tiro por la culata. Díganos su nombre, como yo pongo el mío, y verá como todo queda claro para nuestros foristas y paisanos, incluyéndole, faltaba más.
Para que vea que no soy rencoroso, como tengo varios pares de gafas negras de sol, estoy dispuesto a regalarle unas y echarnos un cigarro en la calle, cuando nos diga quién es.
Me llamo Ángel López y vivo en la calle Real, para más señas. Cualquiera que haya pasado por Aldea me conocerá, indistintamente de la opinión que cada uno tenga de sí y de los demás. Nunca he escrito nada en este foro, al que sin embargo leo a diario. Amigos foristas, os pido un poco de paciencia y atención por lo extenso que pueda parecer esta colaboración, pero es que merece la pena poner las cosas en su sitio.
Desde hace unos días, un tal “Paisano” ha empezado a dar la vara a otro tal “Trobador”, pero con tal mal tiento que, pensando que yo soy éste, está volcando y vociferando asuntos que me atañen personalmente y que quiero aclarar, y si es tan valiente el tal “Paisano”, así como yo pongo mi nombre, que él lo haga también y nos vamos los dos al Juzgado de Guardia y, pasados unos meses, un Juez dará o quitará la razón. Así de claro.
Veamos: en lo que deja traslucir de las asignaciones que se me hayan realizado por parte del Ayuntamiento para las adjudicaciones de Piscina, eventos varios como Fiestas locales o patronales, San Jorge, Carnaval, Navidad, etc. etc., he de informarle que, siempre y sin excepción, he concurrido al concurso público del Pliego de condiciones abierto a todo el mundo. He subastado como todo el mundo y, cuando lo he hecho por la mayor cantidad, se me ha adjudicado con total transparencia. En cuanto al pago de las cuotas y devengos o finiquitos de los servicios adjudicados, todos, absolutamente todos, Sr. Paisano, están liquidados con el Ayto., y si usted conoce alguno que no lo esté, entonces denuncie al Ayuntamiento por no cobrar lo que debe; dicho sea de paso, y aunque hay mucho que cortar, el Ayto. ha cumplido siempre con el pliego de condiciones ofertadas, así como yo con las obligaciones a que me he comprometido al ser el adjudicatario del o de los servicios. ¿Enterado? Obvio resulta, como puede apreciarse, -y le podría dar la cifra exacta de los pagos de cada adjudicación con el resguardo bancario de ingreso, que a mí el Ayuntamiento de Aldea “no me ha dado nada, nada de nada”.
En cuanto a eso de pasar la vida “parado”, esperando la jubilación, también tengo que aclararle que pago mis impuestos muy religiosamente; que, en efecto, desgraciadamente mi trabajo es un tanto discontinuo y, debido a la esencia del mismo –contratas y subcontratas- son frecuentes los períodos de inactividad laboral, unas veces mayores otras menores; en cualquier caso, poco le importa a Vd., que tal vez ande viviendo de la sopa boba y por ello disponga de tanto tiempo. Más vergonzante resultan esas “pensiones” de por vida a hombres sanos como robles concedidas porque en un momento determinado tuvieron “un problema”, y la solución la tenemos que andar pagando todos los demás el resto de su vida, y a lo mejor Ud. no anda muy lejos.
En cuanto a mi “actividad política”, también veo que le preocupa. No se inquiete, el PSOE local tiene excelentes representantes aquí y fuera. No seré yo candidato, pero no le quepa la menor duda de que los apoyaré siempre y en cualquier circunstancia, quitándome y poniéndome la chaqueta por ellos, pero no cambiándomela, que de eso sabrá Ud. y el partido al que defiende mucho más que yo.
Para ir terminando, y puesto que hace referencia al asunto del “Casino”, parece usted saber mucho más que cualquier mortal aldeano, por lo que es fácil deducir que también anda al lado de la teta; pues bien, como ya le indiqué al Sr. Alcalde, estaría interesado en optar a la regencia de la barra del Casino o lo que sea ese edificio, siempre que las condiciones económicas y de arriendo fueran asumibles, en igualdad de condiciones con cualesquiera otras personas que tuvieran interés en la misma explotación, ni más ni menos. No derive hacia mí las técnicas que Vd. bien sabe utilizan otros tan cercanos a la administración local y por las que nos hemos hecho tristemente famosos en demasiados lados.
Una última cosa me queda por añadir y es que, aunque Vd. no lo haya hecho jamás, muchos, muchos aldeanos, incluidos algunos dirigentes de su partido político, me han felicitado reiteradamente por el servicio ofrecido tras la barra del bar, y no en una sola ocasión. Y lo siguen haciendo hoy día, así es que, como bien dice el refrán, y aunque a Vd. le fastidie: “Algo tendrá el agua cuando la bendicen”, ¿no?
Y para terminar, no me queda más que aconsejarle que, si tiene dudas, antes de meter la pata hasta el gollete y provocar una situación que bien le podría costar un disgusto o algo más, consulte la documentación, asesórese, tenga la seguridad de que puede demostrar lo que dice, porque si no, Sr. Valiente, le puede salir el tiro por la culata. Díganos su nombre, como yo pongo el mío, y verá como todo queda claro para nuestros foristas y paisanos, incluyéndole, faltaba más.
Para que vea que no soy rencoroso, como tengo varios pares de gafas negras de sol, estoy dispuesto a regalarle unas y echarnos un cigarro en la calle, cuando nos diga quién es.
