La ESPERANZA busca lo bueno de las personas, en vez de hurgar en lo peor de ellas.
La ESPERANZA abre las puertas que cierra la desesperación.
La ESPERANZA descubre lo que se puede hacer, en vez de lamentar lo que no se puede hacer.
La ESPERANZA obtiene su fuerza de una profunda confianza en Dios y en la bondad fundamental de la humanidad.
La ESPERANZA "enciende una vela" en vez de "maldecir la oscuridad."
La ESPERANZA considera los problemas, grandes o pequeños, como oportunidades.
La ESPERANZA no alberga ilusiones, ni tampoco se rinde al escepticismo.
La ESPERANZA abre las puertas que cierra la desesperación.
La ESPERANZA descubre lo que se puede hacer, en vez de lamentar lo que no se puede hacer.
La ESPERANZA obtiene su fuerza de una profunda confianza en Dios y en la bondad fundamental de la humanidad.
La ESPERANZA "enciende una vela" en vez de "maldecir la oscuridad."
La ESPERANZA considera los problemas, grandes o pequeños, como oportunidades.
La ESPERANZA no alberga ilusiones, ni tampoco se rinde al escepticismo.