Contempla la llanura desde la inmejorable vista de su castillo árabe, en un tiempo ocupado por los Caballeros de la Orden de Santiago. Pasado Alhambra, el camino nos acerca a Ruidera, del mismo nombre que las lagunas que se extienden a lo largo de 25 km en la cuenca alta del Guadiana. Forman un parque natural muy atractivo, entre las provincias de Ciudad Real y Albacete. El agua salva, con cascadas, un desnivel de 120 m y se remansa en quince lagunas.