El pisto, el moje, las gachas, el atascaburras, las morcillas, los enajaos y la fritá, las tortas de manteca, los tronchos en aguasal, las piñas... Evocan sabores, olores,
costumbres y rituales que permanecen en nuestra memoria para decirnos que no todo ha pasado y que hay cosas que perduran como señas de identidad de la existencia de los que vivieron antes que nosotros y fueron escribiendo nuestra
historia.