Los más divulgados son los de Valdepeñas, tintos y blancos ligeros.
Todos suelen consumirse jóvenes, de un año a dos máximo, y su graduación oscila entre los 11 y los 13 grados.
En los últimos años se está haciendo un esfuerzo muy importante por obtener buenos reservas, algo que ya ha comenzado a dar sus
frutos.