Por los mayos se solían encalar las fachadas y adornar de azul los zócalos de las casas manchegas. Antes, los mozos habían escrito a sus novias los más bonitos poemas que habían inventado ó copiado de algún libro de poesías.
Este pueblo de poetas que es Alhambra, esconde entre sus gentes un, no se qué, de encanto y amor a su tierra.
Por muy lejos que estemos ó, por muchos años que pasen, siempre surge ese amor a nuestra tierra y a nuestro pueblo.
Es curioso, como hasta los nietos de los que se... De nada, ya sabes que aprovecho, lo que puedo, voy tirando hasta desde el coche, ya colgare mas, tengo muchas megas y voy muy mal de tiempo.
¡ah...! por fin visite La Calera y el Lobillo ya las veras.