Hombre ten en cuenta que en los años 70 los maestros estaban en su apogeo, igual que los curas y daban toda la leña que les daba la gana y nosotros a callar, el que se quedaba en las permanencias tiraba para delante y el que no pues como un bicho raro a cargar con todos los mochuelos que los niños bonitos hicieran, que los habia.