Cuando se es joven se le da prioridad a cosas superfluas como los churros y el chocolate conforme la vida te va poniendo pruebas llega un momento en el cual ver y saver que esa tradición del encuentro existe en muy pocos pueblos y que tu estas fuera del tuyo por causas de la vida sete pone el vello de punta ese amanecer viendo a la virgen y a su hijo.