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Fiestas 2011
Las Fiestas siempre serán las Fiestas.
Conseguirán privarnos de la Fiesta de los Toros.
Nos podrán dejar sin vaquillas.
Pero nunca, nunca, nos podrán sustraer la ilusión.
-La de las Peñas, cada vez, cada año, son más alegres, más numerosas, más organizadas y sobre todo, compuestas por gente más joven, lo que significa que la tradición transciende, persiste y avanza.
-La principal, la de Nuestra Virgen del Rosario que cada año tiene más adeptos, y de todas las edades y creencias y afinidades sociales y políticas.
Eso es formidable, que todo el pueblo se mezcle, se una, y se vea atraído por lo más preciado que tenemos en este pueblo.
En cualquier caso Fiestas de Almadenejos sin vaquillas o toros, equivalen a "río sin agua", "jardín sin flores", "árboles secos" "matojos quemados", "fronteras cerradas", "tierras baldías", "lumbres apagadas", "amoríos sin cariño", "hábitats en ruina", "amistades ficticias",.........
Gracias a que sentimientos o percepciones de esta índole no han proliferado, entre otras cosas suplidos por y gracias al soporte en el que todos y todas nos hemos asido, que es Nuestra Querida Virgen del Rosario, y la afinidad y diversión de las Peñas, no han surgido movimientos de indignidad y queja a mayores, de los que en las propias Peñas se han comentado.
Sirva esto de ejemplo para que se le haga caso casi siempre al Pueblo, que elige a los gestores, con el objetivo de encontrar en los elegidos la imparcialidad, la ecuanimidad y el bienestar de todos. Por eso hemos optado por la democracia como signo y norma de convivencia.
Viva la Tauromaquia y que plaza tan digna sea destinada a su uso, huyendo del fin incontrolado al que se está derivando, no sin gran polémica, en otra región Española, este tipo de instalaciones y Fiestas tan tradicionales y arraigadas, que son vestigios culturales de nuestra historia.
Cartucho.
Las Fiestas siempre serán las Fiestas.
Conseguirán privarnos de la Fiesta de los Toros.
Nos podrán dejar sin vaquillas.
Pero nunca, nunca, nos podrán sustraer la ilusión.
-La de las Peñas, cada vez, cada año, son más alegres, más numerosas, más organizadas y sobre todo, compuestas por gente más joven, lo que significa que la tradición transciende, persiste y avanza.
-La principal, la de Nuestra Virgen del Rosario que cada año tiene más adeptos, y de todas las edades y creencias y afinidades sociales y políticas.
Eso es formidable, que todo el pueblo se mezcle, se una, y se vea atraído por lo más preciado que tenemos en este pueblo.
En cualquier caso Fiestas de Almadenejos sin vaquillas o toros, equivalen a "río sin agua", "jardín sin flores", "árboles secos" "matojos quemados", "fronteras cerradas", "tierras baldías", "lumbres apagadas", "amoríos sin cariño", "hábitats en ruina", "amistades ficticias",.........
Gracias a que sentimientos o percepciones de esta índole no han proliferado, entre otras cosas suplidos por y gracias al soporte en el que todos y todas nos hemos asido, que es Nuestra Querida Virgen del Rosario, y la afinidad y diversión de las Peñas, no han surgido movimientos de indignidad y queja a mayores, de los que en las propias Peñas se han comentado.
Sirva esto de ejemplo para que se le haga caso casi siempre al Pueblo, que elige a los gestores, con el objetivo de encontrar en los elegidos la imparcialidad, la ecuanimidad y el bienestar de todos. Por eso hemos optado por la democracia como signo y norma de convivencia.
Viva la Tauromaquia y que plaza tan digna sea destinada a su uso, huyendo del fin incontrolado al que se está derivando, no sin gran polémica, en otra región Española, este tipo de instalaciones y Fiestas tan tradicionales y arraigadas, que son vestigios culturales de nuestra historia.
Cartucho.