Serafín:
Yo no corro riesgo ajeno alguno como dices, salvo el que mi propio destino me depare, por dos cuestiones fundamentales:
-No personalizo mis quejas en nadie.
-No es mi cometido y mucho menos en este foro airear ni denunciar temas particulares de paisanos, por lo que creo que no tengo enemigos, ni me los busco.
Así que te ruego vuelvas a olvidarme en tus comentarios interanutas, ya que yo me había dirigido a Ángela y a tí (nuevamente), con toda mi buena fe, que veo sirve de poco.
Sí tengo una particular percepción ahora:
Ángela ha demostrado más respeto al no contestarte, que era simplemente lo que yo os pedía a ambos. En cambio, tú lo has hecho a través de mi persona. Ojo, siempre, a mi juicio que es propio, y que no es ley. En cualquier caso, ya advertía que cuando uno se mete a separar, siempre sale mal parado por alguna de las dos partes discrepantes.
Yo no tengo que esconder nada Serafín. Así que por favor no vuelvas a hablar entre líneas de tus interpretaciones de mis comunicaciones contigo.
Puedes volver a contestarme, aunque si quieres conservar la amistad, no lo hagas en tono que vislumbre amenazas, y no digo con esto, que sea tuya la procedencia.
Es mi deseo que ésta sea mi última contestación a tí en la página. Supongo que tú todavía volverás a replicar, pero ofreciéndote nuevamente mi amistad fuera de aquí, te aconsejo que no lo hagas (aunque eres libre y no hace falta que yo te lo diga).
Cartucho.
Yo no corro riesgo ajeno alguno como dices, salvo el que mi propio destino me depare, por dos cuestiones fundamentales:
-No personalizo mis quejas en nadie.
-No es mi cometido y mucho menos en este foro airear ni denunciar temas particulares de paisanos, por lo que creo que no tengo enemigos, ni me los busco.
Así que te ruego vuelvas a olvidarme en tus comentarios interanutas, ya que yo me había dirigido a Ángela y a tí (nuevamente), con toda mi buena fe, que veo sirve de poco.
Sí tengo una particular percepción ahora:
Ángela ha demostrado más respeto al no contestarte, que era simplemente lo que yo os pedía a ambos. En cambio, tú lo has hecho a través de mi persona. Ojo, siempre, a mi juicio que es propio, y que no es ley. En cualquier caso, ya advertía que cuando uno se mete a separar, siempre sale mal parado por alguna de las dos partes discrepantes.
Yo no tengo que esconder nada Serafín. Así que por favor no vuelvas a hablar entre líneas de tus interpretaciones de mis comunicaciones contigo.
Puedes volver a contestarme, aunque si quieres conservar la amistad, no lo hagas en tono que vislumbre amenazas, y no digo con esto, que sea tuya la procedencia.
Es mi deseo que ésta sea mi última contestación a tí en la página. Supongo que tú todavía volverás a replicar, pero ofreciéndote nuevamente mi amistad fuera de aquí, te aconsejo que no lo hagas (aunque eres libre y no hace falta que yo te lo diga).
Cartucho.