MARCANDO LAS DIFERENCIAS:
En Los gestos pequeños y diarios, es donde está la grandeza, o las miserias de las personas, precisamente por ser pequeños, descubren más a las claras nuestras debilidades y nuestras tendencias, las dejamos al descubierto sin darnos cuenta y sin darles importancia, pero vamos dejando nuestros egoísmos y nuestra forma de ser al descubierto.
Estos días hemos tenido una buena muestra de lo que digo: Estamos en un pueblo con un alto índice de paro, este Noviembre, subió un 2,67 %, y si yo entiendo el gráfico que viene en el foro del Ayuntamiento, suministrado por el Ministerio de Trabajo, el paro total alcanza a 77 personas (no puede ser, debo de entender mal) nuestra juventud no tiene trabajo, y se agarra a lo poco que sale para subsistir, (algunos no cobran ni el paro y a lo mejor ni cuentan como desempleados) los trabajos del Ayuntamiento, “NO LES TOCA”. (Están “RECOMENDADOS”) osease: “VETADOS” Pues bien, en esta situación, estos días pasados se ha celebrado una de las monterías más prestigiosa de la zona, donde la juventud tiene la oportunidad de ganar unos miserables Euros por ser secretario de los pudientes, la discriminación en la elección de estos ha sido total: Por que te veo mal, no me haces la pelota, tu no vienes, en cambio: Eres jubilado, tienes tu pensión, y hecho la partida contigo, tu bienes, este es un buen criterio, era lo que ocurría allá por los años cuarenta, con los pobre segadores que venían de Portugal, (tiempos pasados que se repiten) y hasta lo vemos bien. Esta es la solidaridad que tenemos, este es el grado de compañerismo, y convivencia que demostramos.
Supongamos que, una de estas personas jubilada, con una buena pensión, además es una autoridad, ¿QUÉ DEBEMOS PENSAR DE ELLA? ¿QUÉ DEBEMOS ESPERAR DE ELLA? DESDE LUEGO QUE DIMITA NO, PERO DEBERÍA.
En Los gestos pequeños y diarios, es donde está la grandeza, o las miserias de las personas, precisamente por ser pequeños, descubren más a las claras nuestras debilidades y nuestras tendencias, las dejamos al descubierto sin darnos cuenta y sin darles importancia, pero vamos dejando nuestros egoísmos y nuestra forma de ser al descubierto.
Estos días hemos tenido una buena muestra de lo que digo: Estamos en un pueblo con un alto índice de paro, este Noviembre, subió un 2,67 %, y si yo entiendo el gráfico que viene en el foro del Ayuntamiento, suministrado por el Ministerio de Trabajo, el paro total alcanza a 77 personas (no puede ser, debo de entender mal) nuestra juventud no tiene trabajo, y se agarra a lo poco que sale para subsistir, (algunos no cobran ni el paro y a lo mejor ni cuentan como desempleados) los trabajos del Ayuntamiento, “NO LES TOCA”. (Están “RECOMENDADOS”) osease: “VETADOS” Pues bien, en esta situación, estos días pasados se ha celebrado una de las monterías más prestigiosa de la zona, donde la juventud tiene la oportunidad de ganar unos miserables Euros por ser secretario de los pudientes, la discriminación en la elección de estos ha sido total: Por que te veo mal, no me haces la pelota, tu no vienes, en cambio: Eres jubilado, tienes tu pensión, y hecho la partida contigo, tu bienes, este es un buen criterio, era lo que ocurría allá por los años cuarenta, con los pobre segadores que venían de Portugal, (tiempos pasados que se repiten) y hasta lo vemos bien. Esta es la solidaridad que tenemos, este es el grado de compañerismo, y convivencia que demostramos.
Supongamos que, una de estas personas jubilada, con una buena pensión, además es una autoridad, ¿QUÉ DEBEMOS PENSAR DE ELLA? ¿QUÉ DEBEMOS ESPERAR DE ELLA? DESDE LUEGO QUE DIMITA NO, PERO DEBERÍA.
