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ALMADENEJOS: DATOS PARA UNA HISTORIA Nuevo horizonte...

DATOS PARA UNA HISTORIA Nuevo horizonte

VENTAS: CRUZ y DESCUERNAVACAS
En las descripciones de los pueblos de España, mandadas hacer por Felipe II, la del pueblo de Almadén está manuscrita en el tomo 3º, página 223 vuelto al 230 (Real Academia de la Historia)

“Alude dicha descripción, con auto de fe. Fechado en Almadén el 27 de Diciembre de 1.575, que Nº 40, No es lugar pasajero: hay en el término de esta villa a dos leguas de ella, dos ventas que se dicen de las de la CRUZ Y DESCUERNAVACA, son de personas particulares que viven en ella”.

En un plano de la Dehesa de Castilseras, confeccionado en el año 1.920, y que obra en los Archivos de las minas de Almadén, topográficamente están señaladas estas dos ventas y que hoy pasan desapercibidas.

Sobre el particular ya no hay duda, pues están localizadas ajustándose a la descripción aludida anteriormente, son las dos viviendas que existen a uno y otro lado de la carretera de Almadén, a Ciudad Real, en lugar denominado Estación de Almadenejos-Almadén.

La de la izquierda, mirando al orto heliaco, es hoy día una vivienda particular y con fines labriegos, concurriendo en ella las características propias de la denominación de venta, basta echar una ojeada al Quijote para percatarse de ello. Esta es la correspondiente al nombre de Cruz.

La de la derecha es la de Cuernavacas, y sigue la misma trayectoria que aquella y precisamente la más conocida, ya que desde que se construyó la estación de ferrocarril “Almadenejos-Almadén” ha sido y es una cantina partículas donde el viajero se aprovisiona de bebidas y comidas.

Cervantes, en su Quijote (jeroflicado) alude a estas y muchas ventas, sitas en la Ínsula Barataria y que corresponde a esta Comarca. Los cervantistas, con el devenir del tiempo, tienen la palabra para ajustar estas características coincidentes con las descripciones que se hace en la obra inmortal.

Por imperativa del progreso la venta de Descuernavacas ha sido demolida y hoy es un llano al lado de la carretera. Recordemos con cariño los últimos tiempos de este enclave, pues el practicante D. Antonio Garrido Ramírez, tenía una barra de bebidas y comidas para atender a los viajeros. Era visita obligada a todo el que merodeaba por estos lugares.
Francisco Holgado sagra.