(Aunque lo dejamos hace 2 meses, te sigo queriendo. Un
torreño)
Miro tus ojos cansados
Tu faz que agostó la vida;
Miro la
nieve caída
En tus cabellos dorados.
Eres la misma que fuiste,
Toda tú en manos y cara.
Antes Noemí y ahora Mara,
La misma, mucho más triste.
Te ves como en un
espejo
En mi mirada cansada,
Y piensas, sin decir nada,
Que yo también estoy viejo.
Si no paz, y si no olvido,
Espero algo, y tú también.
Estamos en un andén
Después que el
tren ha partido.