La cruz de san-Tiago es propiamente dicho una espada que utilizaba cada caballero de la Orden para su defensa y hostigar a los demás. Su representación en viene definida por dos dimensiones, mientras la espada real tiene "tres", careciendo la representación de la cruz del "espesor", alguno dirá que la capa de pintura también tiene espesor como desahogo de la irrealidad. Solo el cerebro humano es capaz de idealizar una línea en una sola dimensión, cosa que no se puede representar mediante ninguna ciencia, si trazamos la línea con el dedo sin pintura en el aire, no es posible ver la línea, solo existirá en la imaginación.