V CENTENARIO DE LA FUNDACIÓN DE LA HERMANDAD DEL SALVADOR DEL MUNDO (I)
La celebración del V CENTENARIO de la fundación de la Hermandad del Stmo. Cristo “Salvador del Mundo” (1510-2010) de Calzada de Calatrava (Ciudad Real), se va a convertir en uno de los acontecimientos más importantes desde el punto de vista religioso y cultural que tendrá una enorme repercusión provincial; y quien sabe si algo más. Es conocida la devoción popular que suscita esta singular advocación del Cristo que hunde sus raíces en la Iglesia fundada por Jesucristo. De esta suerte, leemos en la primera carta de Juan cap. 4, versículo 14: “ Y nosotros hemos visto y damos testimonio de que el Padre ha enviado a su Hijo, como Salvador del Mundo”. En Jn. 4,42 se dice: “…y decían a la mujer. Ya no creemos por tus palabras, que nosotros mismos hemos oído y sabemos que éste es verdaderamente el Salvador del Mundo”. Así pues, la Buena Nueva es la de que Jesús es el Salvador de todos los hombres, ya que todos necesitan salvación y la salvación es ofrecida a todos gracias a Cristo. Por tanto, observamos que el epíteto “Salvador del Mundo” es una característica fundamental para denominar a Jesucristo, que entronca con el mensaje del Nuevo Testamento y se basan sus orígenes en la primitiva comunidad cristiana de los apóstoles.
Además, destaca la antigüedad del adjetivo San Salvador en el Campo de Calatrava en la Baja Edad Media, pues tan sólo se documentan dos ermitas y dos cofradías dedicadas a Cristo: una en Almagro (hoy San Blas) y otra en Calzada de Calatrava. Las dos con el nombre de San Salvador. Todo ello alcanza mayor relieve en la longevidad de la advocación “Salvador del Mundo”, si comprendemos que solamente durante los siglos XIV y XV se difundió por toda Europa el culto al Cristo Doloroso, varón de dolores, que simpatizaba con la mentalidad de los hombres europeos de aquella época, atormentados por las guerras, las pestes y el hambre. No obstante, el epíteto “Salvador” se refiere exclusivamente a la divinidad de Jesucristo, reflejada en la Transfiguración del Monte Tabor; y no al significado doloroso y penitencial que se le da actualmente, propio de su humanidad, ya que en cuanto hombre está sujeto al sufrimiento y al dolor. Por este motivo, el Salvador del Mundo debía tener un sentido pascual y triunfal.
Calzada de Calatrava
En cuanto a la localidad de Calzada de Calatrava, debemos decir que es un lugar perteneciente eclesiásticamente, por una parte a la Archidiócesis de Toledo; y, por otra, es un territorio enclavado en los dominios de la Orden Militar de Calatrava. A través de la concordia de 1245, se regulan la jurisdicción y el grado de competencias entre la Orden de Calatrava y el Arzobispado de Toledo; así como la participación en los diezmos y otras rentas de carácter eclesiástico. Su asentamiento y posterior evolución es tras la victoria de las Navas de Tolosa (1212); concretamente en la segunda mitad del siglo XV. Como dato de interés debemos mencionar que ya en 1245 se mencionan las villas, eclesias y lugares señalados de La Calzada, mencionándose por primera vez la villa de La Calzada y su iglesia parroquial. Por tanto, la peculiaridad de este pueblo reside en una doble dependencia jurisdiccional, porque si bien era un territorio incluido en la Orden de Calatrava, también pertenecía, en cuanto a su organización eclesiástica, a la Archidiócesis de Toledo.
La villa de La Calzada en la Edad Media contó con dos iglesias: la parroquial de Santa María y la ermita de San Salvador (hoy del Salvador del Mundo, patrón de la localidad), situada a extramuros de la población. Aunque ubicada dentro de los límites jurisdiccionales de la parroquia de Santa María, la ermita de San Salvador escapaba al control de ésta ya que era propiedad del concejo, que nombraba uno o dos mayordomos encargados de su mantenimiento y administración. De esta suerte, tenemos las primeras noticias acerca de la existencia de dicha ermita, proporcionándolas el libro de visitas del año 1463, limitándose a revisar las cuentas y a confirmar a los mayordomos nombrados por el Concejo. El primer dato que obra en la documentación histórica que nos ha llegado a la actualidad sobre la existencia de la Cofradía del Señor San Salvador, consiste en la visita de dicha cofradía el día 20 de marzo de 1510 por frey Sancho de Londoño, comendador de la Torre el Cañaveral. y el frey Rodrigo del Moral, Prior de San Benito de la ciudad de Jaén; visitadores generales de la Orden y Caballería de Calatrava. En 1549 la ermita de San Salvador había pasado de nuevo a estar bajo el control del Concejo, seguramente por la desaparición de la cofradía del mismo nombre. Después de más de dos siglos de inactividad, el 17 de Julio de 1760 se refunda la Cofradía con ordenanzas aprobadas por el Consejo de la Gobernación del Arzobispado de Toledo, bajo el nuevo nombre de Hermandad y Esclavitud del Santísimo Cristo “Salvador del Mundo”. Posteriormente, en septiembre de 1781 se reconstruyó la ermita.
La celebración del V CENTENARIO de la fundación de la Hermandad del Stmo. Cristo “Salvador del Mundo” (1510-2010) de Calzada de Calatrava (Ciudad Real), se va a convertir en uno de los acontecimientos más importantes desde el punto de vista religioso y cultural que tendrá una enorme repercusión provincial; y quien sabe si algo más. Es conocida la devoción popular que suscita esta singular advocación del Cristo que hunde sus raíces en la Iglesia fundada por Jesucristo. De esta suerte, leemos en la primera carta de Juan cap. 4, versículo 14: “ Y nosotros hemos visto y damos testimonio de que el Padre ha enviado a su Hijo, como Salvador del Mundo”. En Jn. 4,42 se dice: “…y decían a la mujer. Ya no creemos por tus palabras, que nosotros mismos hemos oído y sabemos que éste es verdaderamente el Salvador del Mundo”. Así pues, la Buena Nueva es la de que Jesús es el Salvador de todos los hombres, ya que todos necesitan salvación y la salvación es ofrecida a todos gracias a Cristo. Por tanto, observamos que el epíteto “Salvador del Mundo” es una característica fundamental para denominar a Jesucristo, que entronca con el mensaje del Nuevo Testamento y se basan sus orígenes en la primitiva comunidad cristiana de los apóstoles.
Además, destaca la antigüedad del adjetivo San Salvador en el Campo de Calatrava en la Baja Edad Media, pues tan sólo se documentan dos ermitas y dos cofradías dedicadas a Cristo: una en Almagro (hoy San Blas) y otra en Calzada de Calatrava. Las dos con el nombre de San Salvador. Todo ello alcanza mayor relieve en la longevidad de la advocación “Salvador del Mundo”, si comprendemos que solamente durante los siglos XIV y XV se difundió por toda Europa el culto al Cristo Doloroso, varón de dolores, que simpatizaba con la mentalidad de los hombres europeos de aquella época, atormentados por las guerras, las pestes y el hambre. No obstante, el epíteto “Salvador” se refiere exclusivamente a la divinidad de Jesucristo, reflejada en la Transfiguración del Monte Tabor; y no al significado doloroso y penitencial que se le da actualmente, propio de su humanidad, ya que en cuanto hombre está sujeto al sufrimiento y al dolor. Por este motivo, el Salvador del Mundo debía tener un sentido pascual y triunfal.
Calzada de Calatrava
En cuanto a la localidad de Calzada de Calatrava, debemos decir que es un lugar perteneciente eclesiásticamente, por una parte a la Archidiócesis de Toledo; y, por otra, es un territorio enclavado en los dominios de la Orden Militar de Calatrava. A través de la concordia de 1245, se regulan la jurisdicción y el grado de competencias entre la Orden de Calatrava y el Arzobispado de Toledo; así como la participación en los diezmos y otras rentas de carácter eclesiástico. Su asentamiento y posterior evolución es tras la victoria de las Navas de Tolosa (1212); concretamente en la segunda mitad del siglo XV. Como dato de interés debemos mencionar que ya en 1245 se mencionan las villas, eclesias y lugares señalados de La Calzada, mencionándose por primera vez la villa de La Calzada y su iglesia parroquial. Por tanto, la peculiaridad de este pueblo reside en una doble dependencia jurisdiccional, porque si bien era un territorio incluido en la Orden de Calatrava, también pertenecía, en cuanto a su organización eclesiástica, a la Archidiócesis de Toledo.
La villa de La Calzada en la Edad Media contó con dos iglesias: la parroquial de Santa María y la ermita de San Salvador (hoy del Salvador del Mundo, patrón de la localidad), situada a extramuros de la población. Aunque ubicada dentro de los límites jurisdiccionales de la parroquia de Santa María, la ermita de San Salvador escapaba al control de ésta ya que era propiedad del concejo, que nombraba uno o dos mayordomos encargados de su mantenimiento y administración. De esta suerte, tenemos las primeras noticias acerca de la existencia de dicha ermita, proporcionándolas el libro de visitas del año 1463, limitándose a revisar las cuentas y a confirmar a los mayordomos nombrados por el Concejo. El primer dato que obra en la documentación histórica que nos ha llegado a la actualidad sobre la existencia de la Cofradía del Señor San Salvador, consiste en la visita de dicha cofradía el día 20 de marzo de 1510 por frey Sancho de Londoño, comendador de la Torre el Cañaveral. y el frey Rodrigo del Moral, Prior de San Benito de la ciudad de Jaén; visitadores generales de la Orden y Caballería de Calatrava. En 1549 la ermita de San Salvador había pasado de nuevo a estar bajo el control del Concejo, seguramente por la desaparición de la cofradía del mismo nombre. Después de más de dos siglos de inactividad, el 17 de Julio de 1760 se refunda la Cofradía con ordenanzas aprobadas por el Consejo de la Gobernación del Arzobispado de Toledo, bajo el nuevo nombre de Hermandad y Esclavitud del Santísimo Cristo “Salvador del Mundo”. Posteriormente, en septiembre de 1781 se reconstruyó la ermita.