Queridos Rafi y Juan, perdonad el retraso en intervenir pero he estado con un pelín más de trabajo que es costumbre.
Yo de esta excursión recuerdo cosas con una claridad absoluta y el resto la tengo totalmente olvidadas, por más que intento profundizar no aparece nada.
Lo que recuerdo es lo siguiente: Una tarde noche, todavía hacía calor, fuímos llamdos todos los de primer curso de bachiller a la "academia" y se nos hizo un examen sobre las vestiduras que usaba el sacerdote para oficiar misa, amito, cíngulo, etc, etc,. Estaban presentes en el examen D. Francisco Calero, Claudio Buenestado y tú mismo Juan. Al terminar y después de leer los exámenes nos dijistéis que el mio era el mejor, había habido más de uno que también lo había clavado pero las faltas de ortografía me auparon a mí al primer puesto. El premio era un viaje con la escuela de La Garganta a Córdoba, Sevilla y Huelva. Calculo que esto ocurrió en 1961, porque creo que éramos de primero y porque hacía poco tiempo que había muerto mi madre, esto lo recuerdo porque cuando fuí a la casa de guarda del Rio a pedirle permiso a mi padre, él al mismo tiempo que me daba una moneda de 50 pts me recordó que estábamos de luto.
De Conquista, siempre según mis recuerdos íbamos; D. Francisco Calero, Claudio Buenestado, Moraño y tú, Juan. Yo siempre estaba con vosotros, razón por la que no recuerdo, a excepción de D. Ricardo, a nadie más de La Garganta, bueno un grupo de niños totalmente difuso. También recuerdo, muy a mi pesar, que todas las mañanas madrugaba para ayudar a decir misa a D. Francisco, eso sí me invitaba a desayunar abundamente. De paradas y visitas: la bajada por las rampaa de la Torre del Oro, la llegada a La Rábida, la parada para la última comida en un bar de Despeñaperros, lo bien que os portastéis todos los mayores conmigo, como si fuera vuestro hermano pequeño, eso sí por las noches no me llevabáis con vostros, las canciones, bueno la canción, de los garganteños,"Para ser conductor de primera........" y sobretodo el cabreo que me pillés cuando llegamos a Conquista y me contaron todos lo bien que se lo habían pasado: sin colegio, sin misas ni rosarios, y sin "El Gran Vigía", sentí una profunda frustración, de verdad, y es que los niños, antes y ahora, lo que quieren es jugar y que nadie les diga nada. Compré un recuerdo, una figura de La Giralda que durante muchos años adornó una repisa en la casa mi tía Rosalía.
Bueno creo que ya no recuerdo más, no lo creo, ya no recuerdo más.
Un abrazo para los dos.
Yo de esta excursión recuerdo cosas con una claridad absoluta y el resto la tengo totalmente olvidadas, por más que intento profundizar no aparece nada.
Lo que recuerdo es lo siguiente: Una tarde noche, todavía hacía calor, fuímos llamdos todos los de primer curso de bachiller a la "academia" y se nos hizo un examen sobre las vestiduras que usaba el sacerdote para oficiar misa, amito, cíngulo, etc, etc,. Estaban presentes en el examen D. Francisco Calero, Claudio Buenestado y tú mismo Juan. Al terminar y después de leer los exámenes nos dijistéis que el mio era el mejor, había habido más de uno que también lo había clavado pero las faltas de ortografía me auparon a mí al primer puesto. El premio era un viaje con la escuela de La Garganta a Córdoba, Sevilla y Huelva. Calculo que esto ocurrió en 1961, porque creo que éramos de primero y porque hacía poco tiempo que había muerto mi madre, esto lo recuerdo porque cuando fuí a la casa de guarda del Rio a pedirle permiso a mi padre, él al mismo tiempo que me daba una moneda de 50 pts me recordó que estábamos de luto.
De Conquista, siempre según mis recuerdos íbamos; D. Francisco Calero, Claudio Buenestado, Moraño y tú, Juan. Yo siempre estaba con vosotros, razón por la que no recuerdo, a excepción de D. Ricardo, a nadie más de La Garganta, bueno un grupo de niños totalmente difuso. También recuerdo, muy a mi pesar, que todas las mañanas madrugaba para ayudar a decir misa a D. Francisco, eso sí me invitaba a desayunar abundamente. De paradas y visitas: la bajada por las rampaa de la Torre del Oro, la llegada a La Rábida, la parada para la última comida en un bar de Despeñaperros, lo bien que os portastéis todos los mayores conmigo, como si fuera vuestro hermano pequeño, eso sí por las noches no me llevabáis con vostros, las canciones, bueno la canción, de los garganteños,"Para ser conductor de primera........" y sobretodo el cabreo que me pillés cuando llegamos a Conquista y me contaron todos lo bien que se lo habían pasado: sin colegio, sin misas ni rosarios, y sin "El Gran Vigía", sentí una profunda frustración, de verdad, y es que los niños, antes y ahora, lo que quieren es jugar y que nadie les diga nada. Compré un recuerdo, una figura de La Giralda que durante muchos años adornó una repisa en la casa mi tía Rosalía.
Bueno creo que ya no recuerdo más, no lo creo, ya no recuerdo más.
Un abrazo para los dos.