Estoy casada con un solanero desde hace 20 años y he visto con gran satisfacción las mejoras que el
pueblo ha ido experimentando a lo largo de este tiempo. Sin embargo, hay algo que no me gusta nada, son las
casas que muchos vecinos levantan dejando las paredes de cemento, sin cal ni pintura, dando al pueblo una sencación de pobreza y de estar a medio hacer. También hecho de menos más zonas verdes por distintas zonas del pueblo y
flores en las
ventanas de las casas, pues cuando uno llega allí todas
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