Ahora resulta que no eres barranqueña, pues dices que vives por el Mercado; aunque puede ser que te criaras en el Barranco y luego te fueras al barrio del Mercado o de Santa Quiteria. No sabía yo que habían trasladado los mercadillos de Manzanares y Valdepeñas, aquí no sé yo el resultado si sería a gusto de todos. Quizás un grupo de vecinos desee su traslado pero, yo pienso, que si lo pusieran en el recinto ferial perdería mucha animación, pues quedaría en un extremo del pueblo. Nuestro pueblo no es llano como Manzanares y Valdepeñas, mucha gente mayor va al mercadillo caminando y no creo que bajaran hasta allí. También es cierto que las costumbres se cambian pero... no sé, no sé.
Lo de las aceras lo decía porque pensaba que vivías en el Barranco, y podrías sentirte marginada por la política municipal de "accesibilidad", que es como se dice finamente. Quiero decir que por qué sólo tenemos derecho a disfrutar de vías de comunicación con el centro del pueblo, con aceras anchas, los del barrio del Mercado, y no también todos los demás barrios de La Solana, incluido el Barranco del Lobo. Todos tienen que tener vías de prioridad peatonal para acceder al centro, ya sean calles completamente peatonalizadas o bien, con la calzada reducida al mínimo y una o las dos aceras anchas y cómodas. Esto se viene planteando desde hace tiempo en pueblos grandes y en ciudades, por ejemplo, en el próximo pueblo de Alcázar de San Juan. El concepto de ciudad o pueblo, su urbanismo está cambiando, en paralelo con los cambios de actividades, medios y costumbres. El peatón tiene sus derechos y exige su espacio, para que el entorno urbano sea amable, recreativo, atrayente, que facilite el paseo, la comunicación, la información, el comercio y otras actividades sociales y
Lo de las aceras lo decía porque pensaba que vivías en el Barranco, y podrías sentirte marginada por la política municipal de "accesibilidad", que es como se dice finamente. Quiero decir que por qué sólo tenemos derecho a disfrutar de vías de comunicación con el centro del pueblo, con aceras anchas, los del barrio del Mercado, y no también todos los demás barrios de La Solana, incluido el Barranco del Lobo. Todos tienen que tener vías de prioridad peatonal para acceder al centro, ya sean calles completamente peatonalizadas o bien, con la calzada reducida al mínimo y una o las dos aceras anchas y cómodas. Esto se viene planteando desde hace tiempo en pueblos grandes y en ciudades, por ejemplo, en el próximo pueblo de Alcázar de San Juan. El concepto de ciudad o pueblo, su urbanismo está cambiando, en paralelo con los cambios de actividades, medios y costumbres. El peatón tiene sus derechos y exige su espacio, para que el entorno urbano sea amable, recreativo, atrayente, que facilite el paseo, la comunicación, la información, el comercio y otras actividades sociales y