LA SOLANA: Qué aventura mochachos, con la calor que hacía no pude...

Qué aventura mochachos, con la calor que hacía no pude llegar al Lobillo yendo solo como iba. Me quedé por la casa Astiles, allí a la sombra de un chaparro dí buena cuenta del bocadillo y los zumos y despues de disfrutar del paisaje un rato, me convencí de que lo mejor era dar la vuelta y regresar contento y no reventao. Fracasé en el intento de contactar con Flowerlove, que ella me perdone.