¡Saludos, Octavio! la semana pasada me acordé de ti, mientras me bañaba en el mar Mediterráneo, no muy lejos de Benidorm, en Castellón, Benicassín y Oropesa. Hizo un tiempo apropiado para el baño, el viernes por la mañana en la playa situada al norte de Oropesa, a continuación de la torre del Rey, el agua del mar estaba con una temperatura alta, como en cualquier día caluroso del verano. Zona digna de visitarse la costa castellonense del Azahar, con su montañoso desierto de las Palmas, sus pueblos con castillos y cascos antiguos de barrios moro, judío y cristiano como Onda, las verdes sierras cubiertas de pinos como la de Espadán, y el Maestrazgo al noroeste con pueblos tan sorprendentes para el viajero como Ares, Cantavieja, La Iglesuela, Mirambel... y Morella la bien amurallada, la de altísima puerta de entrada, extraordinaria basílica y entrañable calle Mayor porticada, donde se extienden las terrazas de los establecimientos de hostelería, ocupadas por los turistas a la hora de la comida, presentando el más curioso comedor al aire libre que nunca vi; a mi me tocó comer a cubierto en un local próximo a la calle principal, iba de invitado y seguí el gusto del anfitrión, si otro día vuelvo a Morella me sentaré en una de esas terrazas porticadas, al menos por tomarme un vino enmedio del tranquilo bullicio morellano... y compraré una manta morellana y un buen pedazo de cecina.
Saludo ahora a Ana María, y le digo que ya puede ver el programa de la XXVI Semana de la Zarzuela, se encuentra expuesto en la página web del Ayuntamiento de La Solana (http://www. lasolana. es), en la página de inicio de esta web municipal, en su lado derecho dentro de un recuadro y bajo el título de "destacamos", en el último lugar se encuentra el apartado "zarzuela". Si descargas el programa comprobarás que la zarzuela "La rosa del azafrán", se representará el domingo día 25 de octubre en dos sesiones, a las 18,30 y a las 22 horas, espero que tengas suerte y encuentres entradas.
Parece ser que el debate sobre el escudo de La Solana va dando sus frutos, ayer volvía andando hacia el centro del pueblo, por la entrada de la carretera de Valdepeñas, pasé junto a un gran cartel o valla publicitaria recién puesto de la mancomunidad de La Mancha, mancomunidad que reúne a varios pueblos (Manzanares, La Solana, San Carlos del Valle, Alhambra, etc.), miré distraídamente el cartel y, de pronto, algo me llamó la atención, por encima del nombre de La Solana figuraba una imagen familiar, chocante... la observé con detenimiento, hasta que me convencí de que se trataba del mismo escudo que tantas veces ha acompañado mis mensajes en este foro. Por la tarde, después de un partido de tenis en las cercanas pistas de la Calzada, volví a pasar con el coche junto al cartel, por asegurarme que no había sido una alucinación transitoria, mi visión de la mañana, pero no, el escudo con su campo azul, su forma clásica española y su corona real cerrada seguía allí en el mismo sitio. Me produjo un sentimiento de satisfacción, como cuando alguien te sigue una broma a distancia, aunque en este caso se trata de un asunto que tiene poco de broma... ni tampoco dramatismo alguno, sencillamente es algo lógico que se debía hacer.
Supongo que el escudo nuevo no está legalizado aún, no ha pasado por el pleno municipal ni se ha enviado al organismo competente, imagino que los directivos de la mancomunidad al confeccionar un nuevo cartel, ante el debate suscitado con el escudo municipal, han optado por no seguir repitiendo la versión defectuosa y, en su lugar, han elegido como más convincente el escudo por mi diseñado. Les felicito por abandonar un escudo con evidentes errores heráldicos, como es timbrarlo con casco de hidalgo y plumas de esmaltes distintos a los de sus armas, y devolverle el color del campo que sabemos por documentos históricos era azul... A menos que alguien nos demuestre que ocurrió una modificación legal del escudo, cambiando su campo de azur a gules, cosa que yo, personalmente, no creo que ocurriera y que, además, siempre se podría impugnar en base a los antecedentes históricos.
Tiempo de vendimia y de fiesta el que vivimos, la propia recolección de la cosecha de uva tiene algo de festivo, vivir en grupo en un campo aún verde, de días tibios, agradables, en que se trabaja, come y ríe en común, rodeados del hermoso fruto que dará el más sabroso caldo.
Y días de la otra gran fiesta solanera, junto a la feria de Santiago, la romería de la Virgen de Peñarroya. El viernes y el sábado próximo, los romeros recorrerán andando por caminos, los 32 kilómetros que separan La Solana del santuario del castillo de Peñarroya. Allí encontrarán a la patrona de La Solana, Nuestra Señora de la Encarnación de Peñarroya, llevada hasta allí el sábado por la mañana por los devotos de Argamasilla de Alba, el otro pueblo del que es también patrona. Es una imagen, la de la Virgen, viajera, peregrina, que vive en los dos pueblos y en su castillo-santuario, estando cuatro meses en cada uno de los tres sitios. Como peregrina o viajera es nuestra vida, un camino que a veces se pierde por el cerrado monte, en la oscura noche y que, por fortuna, encuentra también una luminosa guía entre las peñas y los muros de un castillo.
Saludo ahora a Ana María, y le digo que ya puede ver el programa de la XXVI Semana de la Zarzuela, se encuentra expuesto en la página web del Ayuntamiento de La Solana (http://www. lasolana. es), en la página de inicio de esta web municipal, en su lado derecho dentro de un recuadro y bajo el título de "destacamos", en el último lugar se encuentra el apartado "zarzuela". Si descargas el programa comprobarás que la zarzuela "La rosa del azafrán", se representará el domingo día 25 de octubre en dos sesiones, a las 18,30 y a las 22 horas, espero que tengas suerte y encuentres entradas.
Parece ser que el debate sobre el escudo de La Solana va dando sus frutos, ayer volvía andando hacia el centro del pueblo, por la entrada de la carretera de Valdepeñas, pasé junto a un gran cartel o valla publicitaria recién puesto de la mancomunidad de La Mancha, mancomunidad que reúne a varios pueblos (Manzanares, La Solana, San Carlos del Valle, Alhambra, etc.), miré distraídamente el cartel y, de pronto, algo me llamó la atención, por encima del nombre de La Solana figuraba una imagen familiar, chocante... la observé con detenimiento, hasta que me convencí de que se trataba del mismo escudo que tantas veces ha acompañado mis mensajes en este foro. Por la tarde, después de un partido de tenis en las cercanas pistas de la Calzada, volví a pasar con el coche junto al cartel, por asegurarme que no había sido una alucinación transitoria, mi visión de la mañana, pero no, el escudo con su campo azul, su forma clásica española y su corona real cerrada seguía allí en el mismo sitio. Me produjo un sentimiento de satisfacción, como cuando alguien te sigue una broma a distancia, aunque en este caso se trata de un asunto que tiene poco de broma... ni tampoco dramatismo alguno, sencillamente es algo lógico que se debía hacer.
Supongo que el escudo nuevo no está legalizado aún, no ha pasado por el pleno municipal ni se ha enviado al organismo competente, imagino que los directivos de la mancomunidad al confeccionar un nuevo cartel, ante el debate suscitado con el escudo municipal, han optado por no seguir repitiendo la versión defectuosa y, en su lugar, han elegido como más convincente el escudo por mi diseñado. Les felicito por abandonar un escudo con evidentes errores heráldicos, como es timbrarlo con casco de hidalgo y plumas de esmaltes distintos a los de sus armas, y devolverle el color del campo que sabemos por documentos históricos era azul... A menos que alguien nos demuestre que ocurrió una modificación legal del escudo, cambiando su campo de azur a gules, cosa que yo, personalmente, no creo que ocurriera y que, además, siempre se podría impugnar en base a los antecedentes históricos.
Tiempo de vendimia y de fiesta el que vivimos, la propia recolección de la cosecha de uva tiene algo de festivo, vivir en grupo en un campo aún verde, de días tibios, agradables, en que se trabaja, come y ríe en común, rodeados del hermoso fruto que dará el más sabroso caldo.
Y días de la otra gran fiesta solanera, junto a la feria de Santiago, la romería de la Virgen de Peñarroya. El viernes y el sábado próximo, los romeros recorrerán andando por caminos, los 32 kilómetros que separan La Solana del santuario del castillo de Peñarroya. Allí encontrarán a la patrona de La Solana, Nuestra Señora de la Encarnación de Peñarroya, llevada hasta allí el sábado por la mañana por los devotos de Argamasilla de Alba, el otro pueblo del que es también patrona. Es una imagen, la de la Virgen, viajera, peregrina, que vive en los dos pueblos y en su castillo-santuario, estando cuatro meses en cada uno de los tres sitios. Como peregrina o viajera es nuestra vida, un camino que a veces se pierde por el cerrado monte, en la oscura noche y que, por fortuna, encuentra también una luminosa guía entre las peñas y los muros de un castillo.