El término de
Manzanares constituyó una encomienda de la Orden de Calatrava, cuyo titular o Comendador residía en el
castillo y administraba las rentas de la Orden de su término. El espacio donde se asienta la ciudad fue reconquistado por Martín Martínez, quinto maestre de la Orden de Calatrava, a principios del año 1198, edificándose entonces el castillo como punto de control del territorio, y a partir de 1239 se erigió y pobló la villa junto a la fortaleza, siendo amurallada en 1352 por el maestre don Juan Núñez de Prado, obra que fue realizada por sus habitantes en cinco años; a cambio, el maestre condonó a la villa ciertos impuestos.
A partir de ese momento, Manzanares constituyo una de las encomiendas más ricas y prosperas de la Orden Calatrava, siendo llamada por tal motivo «la Encomienda Loca». Es por este motivo que muchos nobles y miembros de la
Familia Real quisieron hacerse con el control vitalicio de la misma, por las cuantiosas rentas que aportaba.
Manzanares se creó hacia la primera mitad del siglo XIII, tal y como cita la Relación Topográfica de Felipe II (año 1579), conservada en la
biblioteca de El Escorial, según la cual se cree que la villa se fundó unos trescientos cincuenta años atrás y añade que en ella hay un buen castillo que es más antiguo que la misma villa.
En torno al Castillo crecería la villa de Manzanares hasta tener entidad de población. En el Castillo estableció la Orden de Calatrava la Sede de la Encomienda de Manzanares.
El castillo fue construido por la Orden de Calatrava para asegurar el dominio de su emplazamiento una vez deslindados los términos con la de Santiago en 1239. Por entonces, era un emplazamiento estratégico que debía defender el empalme de las Cañadas Reales de
Cuenca y
Soria, las cuales eran las mejores
vías de comunicación en su tiempo con el
río Azuer.
En 1864 se produce la Desamortización, quedando en manos privadas y destinándose a vivienda, sufriendo diversas obras y transformaciones, aunque por fortuna el núcleo más importante permaneció en aceptables condiciones para su recuperación. Actualmente ofrece servicio de hospedería.
Según la anteriormente citada Relación topográfica, la villa tomó su nombre del castillo, el cual al calor del romanticismo del siglo XIX paso a denominarse de «
Pilas Bonas», nombre erróneo que nos ha llegado hasta hoy. En el municipio hay así mismo vestigios de antiguas poblaciones, como las
Cuevas del Moro cercanas a la
plaza de toros y el viejo
Torreón de Moratalaz.
Manzanares se creó hacia la primera mitad del siglo XIII tal y como cita la Relación topográfica del rey Felipe II de
España (año 1579), conservada en la biblioteca de
Monasterio de El Escorial, según la cual se cree que la villa se fundó unos trescientos cincuenta años atrás y añade que en ella hay un castillo que es más antiguo que la misma villa.
A mediados de los años 90 se produjo la independencia de hasta entoces pedanía los
Llanos del Caudillo, escindiendose por lo tanto su término municipal en una pequeña proporción
El castillo fue construido por la Orden de Calatrava para asegurar el dominio de su emplazamiento una vez deslindados los términos con la de Santiago en 1239. Por entonces, era un emplazamiento estratégico que debía defender el empalme de las Cañadas Reales de Cuenca y Soria, las cuales eran las mejores vías de comunicación en su tiempo con el río Azuer.
El castillo se conocía por los nombres de Pilas Bonas o Manzanares. Según la anteriormente citada Relación Topográfica, la villa tomó su nombre del castillo. En el municipio hay así mismo vestigios de antiguas poblaciones, como las Cuevas del Cerro de la plaza de toros y el antiquísimo Torreón de Moratalaz.
El término de Manzanares constituyó una de las más importantes encomiendas de la Orden de Calatrava, cuyo titular o Comendador residía en el castillo y administraba las rentas de la Orden de su término. El antiguo
pueblo fue reconquistado por Martín Martínez, quinto maestre de la Orden de Calatrava, a principios del año 1198, edificándose entonces el castillo y en 1299 se erigió y pobló la villa junto al castillo y fue amurallada en 1352 por el maestre don Juan Núñez de Prado, obra que fue realizada por sus habitantes en cinco años; a cambio, el maestre condonó a la villa ciertos impuestos.
Manzanares fue ocupada varias veces en el curso de la guerra de la Independencia, alzándose contra los invasores y obteniendo varias victorias.
Manzanares fue ocupada varias veces en el curso de la Guerra de la Independencia; en cuyo periodo fue nombrada la villa capital de La Mancha. Destaca en este tiempo la figura del párroco Pedro Álvarez de Sotomayor que ofreció su vida a cambio de la de sus feligreses.
Destaca en este tiempo la figura del párroco Pedro Álvarez de Sotomayor que ofreció su vida a cambio de la de sus feligreses. También es digno de mención la proclamación del Manifiesto de Manzanares de O'Donell redactado por Cánovas del Castillo en nuestra localidad.
A mediados de los años 1990 se produjo la independencia de los Llanos del Caudillo, escindiéndose por lo tanto de su término municipal una pequeña parte.
HISTORIA. La fundación de esta v. es posterior al siglo X: concedida al abad Raimundo la v. de Calatrava (V.) señaló el rey D. Sancho III sus térm., que comenzaban desde las Navas de Tolosa, y se terminaban en las sierras de Orgáz, en cuyo intermedio se contenían las tierras, en que al presente se hallan las v. de Almagro, Manzanares,
Daimiel y otras: con el abad vinieron muchos guerreros, según ya dijimos en su lugar, y entre ellos algunos de la
casa antigua solariega infanzona Sagasti-Manzanares, que estaba 2 leg. de Fitero, y era de las más calificadas de
Vizcaya: establecida ya la orden en aquella ant. v., el maestre D. Martin Martínez, que la gobernó desde el año 1199 hasta el 1207, hizo edificar el cast. de Manzanares, poco más o menos del modo que se halla, y puso en él varios caballeros que lo defendiesen, descendientes los más de la dicha casa solariega, y de ellos tomó el cast. la denominación, llamándose la casa de Manzanares. En el año 1229 se comenzó á poblar la v., y en el año 1352 se cercó teniendo entonces 200
CASAS, y siendo Maestre XVIII de Calatrava, D. Juan Núñez de Prado. De poca consideración seria cuando todavía alcanzaba a ella el término del cast. del Tocón, hoy la
Membrilla, de la orden de Santiago, pues en las casas consistoriales de Manzanares hay 1
pozo que todavía se usa, adonde venían a dar
agua los de Membrilla: de lo dicho resulta el aumento que ha tenido la pobl. en los años sucesivos.
* Diccionario Geográfico – Estadístico - Histórico de España. Pascual Madoz, 1848.