Al pasar con dirección a Solanilla del Tamaral, lo hago por el cementerio de mestanza, que queda a la derecha de la carretera en la salida Este de la localidad. Cual será mi alegría y a su vez tristeza al comprobar lo bonito que están dejando el lugar de descanso de sus seres queridos, me parece justo y necesario. Mi tristeza es comprobar que su pedanía Solanilla del Tamaral, sus muertos no son igualmente tratados, el cementerio no es atendido con igualdad, existe un abandono en el cuidado y tratamiento. Solanilla no pidió ser aldea de Mestanza, pero si es un anejo, sus vecinos merecen oportunidad y respeto. Sus habitantes fallecidos, tratados y considerados, igual al resto.