Jajajaja. Marce, digo yo que va demasiado elegante para dedicarse a poner ladrillos. Manolo, creo que, más bien ordenas y miras.
Ya te digo, Jovita. El albañil cuando lo haya visto de esta guisa le habrá subido un 20% el importe de la obra, jejejeje!
Besotes.
Besotes.