Pepín, ¡pero que preciosa Paula teneis en
casa! Con esos ojazos se ve que tenia buena preparación para pasárselo bien en el
bautizo, es una moneria la chiquitina.
Ayer no pude escribir y he leido que fue el
santo de tu padre, ¡un recuerdo cariñoso para él! no sabia que se llamaba Anastasio, siempre lo conoci por Calero.
Un beso.