¿Cómo que a quien le corresponda?, bien sabes tú que es a mí.
Ya sabes que me tienes que avisar cuando ya estén secos para que me pase a recogerlos. Pues nada Feli, cuando estén sequitos y ya no se abran al freirlos, vuelve a avisarnos.
Abrazos. Pues ves preparando la parrilla que nos hacemos unos trocitos para darle el visto bueno. A quién corresponda: Ya tenemos los chorizos colgados.
Abrazos. Apolonio, no te faltan relatos y todos muy entrañables.
¡Qué recuerdos los días de matanza! ¡Y qué frío ayudando a mi madre, con el agua, cuando lavaba las tripas debajo de una encina!
Un abrazo